Resumen y sinopsis de Los hijos de Húrin de J. R. R. Tolkien
Los hijos de Húrin es una de los grandes relatos que fundamentan la historia de la Tierra Media y se sitúa en la Primera Edad, cuando elfos, hombres y enanos llevaban unos pocos siglos sobre la tierra. Junto con las historia de Beren y Lúthien, es la historia más mencionada en El Señor de los Anillos y en El Silmarillion como referente del heroísmo y la tragedia en la lucha contra el Mal, en la Primera Edad encarnado en la figura de Morgoth. Una historia trágica de amores imposibles, pasiones incomprendidas y guerras sin cuartel entre el Bien y el Mal. Con hombres, elfos, enanos, orcos y dragones.
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Reconozco que tengo debilidad por el universo creado por Tolkien y si bien no es de sus mejores novelas, al tener lagunas o saltos narrativos, tiene la virtud de transportarme a las aventuras y desventuras de la saga de los Húrin como si fuera un protagonista más.
Más sencillo de leer que el Silmarilión se hace de corrido. Muy recomendable.
Ésta es una gran novela épica. Sorprende el hecho de que no tiene nada que ver con el Hobbit, novela esta última, que si bien es cierto es una narrativa muy hermosa, también es cierto que es de carácter muy infantil, y de hecho a ese público está dirigida desde su concepción (aunque hoy día sabemos que posterior a la publicación de El Señor de los Anillos, tuvo que ser ligeramente modificada para que no desentonara con ésta; aun así, a mí me sigue pareciendo sólo un bonito cuento para niños). No obstante, y regresando a la presente historia, ésta sí que es todo lo contrario: una epopeya trágica que en varios de sus pasajes nos hace recordar las grandes épicas de la historia universal.
Habrá quienes me tachen de exagerado, pero a lo largo de sus páginas, existen pasajes y diálogos enteros que son casi idénticos (en el estilo literario) a los que se encuentran en las historias bíblicas del Antiguo Testamento, más específicamente en los libros de Samuel, Jueces, Crónicas y Reyes. El protagonista principal es Túrin y su viaje es extraordinario y sumamente trágico al mismo tiempo. Nace en medio de las guerras contra Melkor o Morgoth, y siendo muy pequeño, después de que su padre parte a la guerra, es exiliado al reino de un rey elfo, donde será educado como un príncipe. Es en este idílico reino donde empiezan sus hazañas y desventuras, estas últimas en parte provocadas por la maldición que Morgoth le impuso a toda la descendencia de la Casa de Hador una vez que hizo prisionero a Húrin su padre.
Túrin, que es mortal, tendrá que enfrentar la envidia de algunos elfos que son muy inferiores a él en valentía y fuerza, y es aquí donde empiezan sus problemas, ya que, al igual que el príncipe Moisés del Éxodo, dará muerte a un elfo influyente y malicioso, por lo cual tendrá que huir deshonrado. Posteriormente se unirá a un grupo de proscritos y se convertirá en un asaltante de caminos y aldeas muy al estilo de David cuando era perseguido por el rey Saúl. Lo alcanzará su gran amigo el elfo Beleg Arcofirme, y a similitud de Odiseo y Diómedes, Gilgamesh y Enkidu o Rama y Hánuman, lo acompañará en varias de sus aventuras contra los malvados Orcos. Pero como la fatalidad lo sigue a donde quiera vaya (spoiler a continuación), por error matará a su gran amigo y maestro de toda la vida. A lo cual vuelve a huir y años después encuentra refugio en otro gran reino élfico, donde, gracias a sus dotes como guerrero, escalará hasta convertirse en el principal consejero del rey. Pero con ello llega la sombra nuevamente, y esta vez nada puede hacer para evitar la caída de su nueva ciudad adoptiva, en la cual hay una hermosa elfa que se enamora de él, dicho sea de paso. Y una vez más el peregrinar del héroe en busca de un hogar, esta vez en medio de un bosque entre leñadores y cazadores.
Finalmente lo encuentra el amor, pero poco a de durar, ya que la guerra de Morgoth llega hasta ahí. En esta ocasión es Glaurung, el Padre de los Dragones, enviado por Morgoth para acabar definitivamente con toda la descendencia de Húrin. Y es aquí donde, al estilo de Beowluf (la gran épica anglosajona de la cual Tolkien era un gran erudito), se llenará de gloria usando la poderosa espada Gurthang para acabar con el temible dragón. Sin embargo, en su lecho de muerte, tras la batalla, el maligno dragón le dará la última estocada a la trágica vida del héroe, al revelarle un secreto que provocará la derrota definitiva y el triste final del gran Túrin matador de Orcos y dragones. En verdad os digo que es un final tremendo y mejor no revelar más para quien se anime a leerlo.
Por cierto y por último, es sorprendente que Hollywood aún no le haya metido mano a esta extraordinaria historia. Con esta obra no queda la menor duda de que Tolkien fue todo un genio (quizá el mejor) de la narrativa fantástica.
A pesar de un comienzo un poco oscuro y muy confuso la novela va cogiendo ritmo poco a poco. Es bastante entretenida aunque deja mal sabor de boca al final.
El estilo se acerca más al Silmarillion que a El Señor de los anillos.
Tengo que decir que una vez terminada esta historia creada por Tolkien tengo cierta duda en puntuarla porque siento que algo le falta, pero no sé decir el qué.
Desde mi punto de vista, El Hobbit o ESDLA son mucho mejores en todo, sobre todo en el desarrollo literario. Estas cuentan una historia y a mi parecer Los Hijos de Hurín la cuenta pero al estilo del Silmarillon, es decir, cuando lo he leído me he sentido como si estuviera leyendo un mito griego, muy bueno, pero mostrado a pinceladas.
En definitiva, me ha gustado pero creo que es para fans incondicionales de Tolkien (lo cual soy).
Quizá un poco pesado al principio, y tanto sobrenombre de Húrin puede provocar confusión, el principio es un poco caótico y, yo al menos, te lo esperas que sea difícil de leer, pero a medida que indagas en él, te apasiona cada vez más, hasta que te das cuenta que te lo has acabado, pues los capítulos no son excesivamente largos, pero sí contienen mucha información, es un libro que me he acabado en una tarde, y eso en mí dice mucho, para mi gusto, mejor que El Señor de los Anillos.
Gran relato de Tolkien, superó mis expectativas con creces. Tiene un tono oscuro que va siempre acorde con las tragedias que acontecen.
Es un libro excepcional, pues uno esta acostumbrado a las historias que tienen un final feliz, pero en Los Hijos de Hurin, se puede vivir la triste historia de Turin, que por desgracias del destino tiene, aunque muchas aventuras, también desventuras. Es uno de los mejores libros que he leido y la verdad, casi lloro con el final.
No hay mucho que decir... Si te gusto El Señor de los Anillos (por no decir el Hobbit o el Silmarillion, que se supone son menos famosos), éste no te defraudará...
Para aquellos que leyeron el Silmarillion (lo mejor de Tolkien para mí) sentirán una especie de dejavu al leer éste, pues es una versión extendida del capítulo más largo del Silmarillion...
En conclusión es un muy buen libro, con la narrativa característica de Tolkien. Muy recomendado, pero aclaro que para comprenderlo correctamente es indispensable leer primero el Silmarillion, de lo contrario puede llegar a ser muy confuso la infinidad de nombres, lugares y eventos... Es solo una recomendación.
Es una lástima que no escribiesen un libro así para la historia de Beren y Luthien, que en lo personal es la historia más bella de Tolkien.
Mucho mejor el Señor de los Anillos, este libro es magnífico, muchísimo más rápido, atrayente y una historia mucho más bonita aunque está menos pensada la trama que otros libros
Le pongo sólo un siete porque a pesar que la historia me gustó bastante, acabé con un lio tremendo de nombres de personas y lugares. Aunque el mapa ayuda bastante, al principio no seguía bien las rutas y para mí es una parte importante al leer Tolkien, pues en el Hobbit pude seguirlas muy fácilmente y lo disfruté mucho. Lo de los nombres lo di por imposible, me quedé con los mínimos para poder seguir la historia.