Resumen y sinopsis de Pobre Manolito de Elvira Lindo
Manolito Gafotas es un charlatán capaz de marear no sólo a sus padres, a su abuelo y a la señorita Asunción, sino también a la psicóloga del colegio, a Carabanchel Alto y a España entera.Han participado en esta ficha: yiyolon persac
Manolito tiene desparpajo de sobra para llenar varios libros con sus emocionantes vivencias. A veces se va de la lengua, se porta mal y se mete en líos. Se saca de la manga un jarabe para la tos muy inusual, o un corte de pelo de lo más original, sueña e inventa situaciones de película, exagera las ya existentes, o recrea sin querer secuencias propias de un western o del cine familiar ochentero en un entorno cotidiano.
Este conjunto de relatos protagonizados por el célebre personaje infantil y sus amigos pertenece a aquellas lecturas de infancia que aguantan e incluso mejoran en la época adulta, llevándonos a un microcosmos familiar, escolar y de barrio de la mano de un niño madrileño cualquiera de los años 90, cuyas aventuras están siempre llenas de humor y de costumbrismo. Un niño cualquiera, pero al mismo tiempo único, con sus muletillas características y una llaneza de expresión que alcanza lo maestro.
Una mirada la suya cargada de inocencia y a la vez de perspicacia, incluso satírica, que ilumina lo corriente, acompañada de unos secundarios tan entrañables como el “Imbécil”, hermanito mimado tan querido como detestado, el abuelo Nicolás, o el mejor amigo del chaval y quien mejor entiende sus desvelos, y unos compañeros de juegos y de estudios que encarnan unos estereotipos fácilmente reconocibles en la vida real.
Manolito tiene además una madre autoritaria y sufrida que carga con todo a sus espaldas, de quien recibe castigos físicos (vistos como algo simpático, lo cual traería cola a día de hoy), y un padre ausente a causa de su empleo de camionero, y por lo tanto, absolutamente idealizado. El último capítulo es el que da continuidad y conclusión a estas anécdotas, y nos muestra lo que significa que el mayor drama de tu vida sea un suspenso en matemáticas. Que se acaben las clases y que comience el verano, ese verano que, en toda su pureza radiante y posibilidades que se abren, parece que durará para siempre, con nuestro “pobre Manolito” despertando a la vida.
La autora narra la niñez sin ser nunca didáctica ni aleccionadora, sin condescendencia, situándose (y situándonos) en su piel. De hecho, asoma una crítica de la psicología y la educación “moderna”, o del buenismo del ser todos ganadores. Reivindica no al niño perfecto en todo, sino al que comete errores, es humano y un poco gamberro. Señala esas pequeñas hipocresías del mundo adulto, la presión del grupo y del ambiente, con el fútbol y el barrio como identidad, signo de pertenencia y elemento de socialización. No abandona, en fin, el humor ni la retranca, el ambiente castizo, la picaresca, con detalles a veces tirando a escatológicos, ni siquiera cuando podría haber caído en lo ñoño.
Creo que éste fue uno de los libros de Manolito que más disfruté junto con mi hija, a pesar de los giros y expresiones castellanas que no siempre entiende un latinoamericano, y menos un niño
No puedo evitar reírme a mis años con los relatos de este niño tan "salao". Genial.
Este libro me ha gustado mucho porque trata de un niño llamado Manolito, un niño muy travieso que siempre anda con las suyas. En esta historia le dan las vacaciones y le pasan muchas cosas ....
Ameno y divertido, aventuras cotidianas y escolares, actitudes y pensamientos infantiles con gracia para toda la familia.
Como todos los libros de la colección: genial.