Resumen y sinopsis de Mi año romano de André Aciman
Roma, 1960. Mientras un André Aciman adolescente observa el puerto de su nueva ciudad, su madre se preocupa por el equipaje: treinta y dos maletas y baúles que contienen todo su mundo. Acaban de llegar a Italia desde Alejandría, hogar que han tenido que dejar atrás. Su padre sigue en Egipto y ahora André es el cabeza de familia. Solían tener una buena vida, pero todo vestigio de su estatus se ha esfumado tras su huida.
El autor, su hermano pequeño y su madre se mudan a un apartamento de la capital italiana que justo antes de su llegada se usaba como burdel. Mientras buscan la manera de encontrar su sitio en la ciudad, el autor se encierra en su habitación para leer un libro tras otro. Y será precisamente la literatura la que le abrirá la puerta de Roma, ciudad que lo verá pasar a la edad adulta y que terminará ocupando un espacio crucial en su vida.
Evocadora y hermosa a partes iguales, con una capacidad poética de la que solo Aciman puede hacer gala, Mi año romano se sumerge en la verdad luminosa y frágil de lo que, a pesar de todo, constituye realmente un hogar.