Resumen y sinopsis de La vida en miniatura de Mariana Sández
Con una escritura a la vez exquisita y natural en la que despuntan la ternura y el humor, Mariana Sández nos brinda una sátira social donde se funden lo más mordaz y lo más bello de la vida.
Dorothea Dodds lleva 59 años viviendo sin que se note. A la sombra de un hermano ausente y problemático, es ella quien se ocupa de sus padres. Es hija, secretaria, ama de casa y adhesivo invisible que lo sostiene todo. Es, sin lugar a dudas, la persona ideal que cualquiera querría dejar a cargo de su casa durante las vacaciones de verano. Y un buen día, cuando necesita escapar de todo, eso es precisamente lo que decide hacer. Con la ayuda de su prima inglesa, Mary Lebone, Dorothea consigue trabajo cuidando casas y mascotas a lo largo y ancho de la campiña inglesa, y en estos atisbos de vidas ajenas encuentra pistas sobre la suya propia. Con una prosa que sigue la huella de Natalia Ginzburg o Iris Murdoch, La vida en miniatura es un libro de viajes donde el camino se recorre por dentro: Dorothea cruza los campos de Inglaterra a la vez que desanda episodios clave de su pasado y aprende a vivir en su presente.
He descubierto a esta autora argentina gracias a esta novela que es amable, sencilla, está bien escrita y desprende a menudo mucha ternura. Trata sobre la búsqueda de identidad de una mujer ya madura que decide cambiar de vida haciéndose cuidadora de casas y animales. De vivir con sus padres pasa por primera vez a sentirse libre y a ser dueña de su vida. En su camino va encontrándose a diferentes personajes y va recordando episodios familiares, algunos de ellos muy entrañables. Una historia con la que es fácil identificarse.