Resumen y sinopsis de Kairós de Jenny Erpenbeck
Una apasionada historia de amor tóxico en el marco del final del comunismo y la caída del muro de Berlín.
«Cuentan que Kairós, el dios del instante feliz, tenía un rizo en la frente y solo así podía uno sujetarlo. Ahora bien, en cuanto alzaba el vuelo con sus pies alados, mostraba la parte posterior del cráneo, pelada, reluciente y sin nada en ella a lo que las manos pudieran agarrarse. ¿Hubo un instante más feliz que aquel en que, siendo una chica de diecinueve años, conoció a Hans?»
Berlín Este, 1986. Un día de noviembre Katharina, de diecinueve años, conoce en un autobús a Hans, un escritor ya entrado en la cincuentena, casado y con un hijo adolescente. Inician una relación amorosa compleja y no necesariamente idílica. Mientras tanto, el bloque comunista empieza a tambalearse, y la RDA acabará colapsando, con la icónica imagen de la caída del Muro.
Se abre un tiempo de esperanzas, pero también de incertidumbres. Un tiempo de zozobra y desconcierto, que cada uno de los personajes vivirá de forma muy distinta por la diferencia de edad que los separa.
Huyendo de arquetipos y clichés, Jenny Erpenbeck construye una historia de amor llena de altibajos y no exenta de manipulaciones y toxicidad. Y al mismo tiempo traza una crónica repleta de aristas y matices sobre un momento crucial de paso, en el que una sociedad represiva pero también protectora se convierte en otra libre pero también agresivamente competitiva.
Esta es una novela sobre una relación entre una mujer de 19 años y un hombre, casado, con hijos y viejo conocido de sus padres, y en la cincuentena.
Lo que empieza siendo un romance apasionado, se ve súbitamente salpicado por los celos y poco a poco se va convirtiendo en el retrato de una relación tóxica.
En paralelo, el país donde esto sucede, Alemania Oriental, está a punto de desaparecer, no sin nostalgia por parte de algunos de sus ciudadanos.
La narración está bien construida, e intenta mostrar las interioridades de cómo una relación se vuelve dañina y al mismo tiempo ninguno de los protagonistas quiere terminarla...
No sé si por eso, la verdad es que no he conseguido empatizar con ninguno de los personajes principales.