Resumen y sinopsis de Exilium de María Negroni
¿Dónde si no en el exilio habla la palabra poética? ¿Dónde sino en la pérdida se eleva lo que nombra la ausencia, la distancia, la interminable lejanía? Y allí donde esa palabra dice lo que añora comienza su sueño despierto: quiere restituir con imágenes oscuras lo que se le sustrajo. Juega otra vez y sabe que ese exilio comenzó cuando la infancia se abandona. La infancia como territorio donde lo imaginario se consagra, pero retorna como pérdida o repetición monstruosa, como orfandad o duelo.
Porque el infante es el que todavía no ha hablado y en consecuencia vive en su paraíso mudo y sin tiempo. Pero basta que la palabra sea aprendida para que el exilio comience su derrotero. Entonces vive su gran paradoja: para recuperar el paraíso solo cuenta con la palabra que fue, justamente, aquello que lo distanció para siempre del seno originario: «a este desapego / lo llamamos infancia», escribe María Negroni.
El eterno retorno de ese exilio es la condición trágica del poema: la lengua nace donde muere el paraíso, perdido. JORGE MONTELEONE