Resumen y sinopsis de Yo sé por qué canta el pájaro enjaulado de Maya Angelou
En la primera y más conocida de sus novelas autobiográficas, Maya Angelou nos habla de su dura infancia y de los trances por los que tuvo que pasar hasta convertirse en una mujer independiente. Criada en un pequeño pueblo de Arkansas por su abuela, Angelou aprendió mucho de esta mujer excepcional y de una comunidad extraordinariamente cohesionada; unas lecciones de vida que la ayudarían a sobrellevar las dramáticas circunstancias a las que tuvo que enfrentarse posteriormente en San Luis y California. Este emocionante relato retrata también la vida de la mayor parte de la población negra del Sur de los Estados Unidos durante la primera mitad del siglo XX.
Angelou, una de las poetas más famosas de EE. UU., tenía un don extraordinario para narrar; su libro, que es a la vez alegre y triste, misterioso y memorable, como la niñez, nos habla de los anhelos y miedos infantiles, del amor y del odio, de cómo las palabras pueden hacer del mundo un lugar mejor.
Publicado por primera vez en 1969, Yo sé por qué canta el pájaro enjaulado es un clásico de la literatura universal que ha conquistado a un millón de lectores en todo el mundo.
Increíblemente sobrevalorada, Yo sé porque canta el pájaro enjaulado (I know why the caged bird sings, en inglés) es un libro que no presenta ningún interés ni como novela autobiográfica, ni como relato costumbrista. Es una lectura lenta y pesada que cuesta acabar, asimilar y aceptar.
Maya Angelou, autora de esta pesadez insufrible, es una activista bastante conocida en Estados Unidos. También es una poeta bastante reconocida, aunque esta faceta es menos explotada que la del activismo racial. Está más que claro que Angelou tiene una gran maestría con la pluma, siendo una de las mejores escritoras que he leído nunca con un estilo complejo y elegante, que cuenta con una prosa sencilla y muy bien desarrollada, un lenguaje de gran belleza lírica e increíblemente bien escogido y unas descripciones muy poéticas, visuales y coloridas que te permiten meterte de lleno en el texto que estás leyendo. Y sin embargo, el principal punto débil, además de la historia, está en los personajes. En principio, al ser un libro “autobiográfico” la protagonista es la propia autora. Sin embargo, me he dado cuenta de que es un personaje construido de manera superficial. Realmente, y pese a ser la propia Maya, no logras conocer demasiado de ella y existe una enorme distancia entre ella y el lector, algo que te desanima y evita que empatices. El resto de los personajes tampoco están mejor hechos que ella misma. Y salvo alguna característica tangencial de los mismos, te acaban resultando vacíos y poco definidos, cuando no directamente confusos y difíciles de descifrar.
La historia que nos narra Yo sé porque canta el pájaro enjaulado consiste en los años de infancia y parte de la juventud de la propia autora. Y es que Maya y su hermano Baily son enviados por sus padres a vivir en Stamps, un pequeño pueblo de Arkansas. En la América represora de los años 40, la jerarquía está muy bien definida y los negros ocupaban uno de los escalafones más bajos. Es una América racista y brutal y esto se nota mucho más en las poblaciones rurales que en las grandes ciudades. Así que Maya nos va desvelando cómo era vivir en esa época y ese lugar con su abuela, muy devota, y su tío Willy, un hombre con una grave discapacidad. Pero los recuerdos de Maya acaban resultándote engañosos. Para empezar no te acabas creyendo el festival de emociones que, según ella, se despliega en algunos momentos de su infancia. Creo que ese tipo de memorias tiene una capa de “barniz de la emoción adulta”, es decir, las emociones que según la escritora siente en determinados momentos son fruto de una reflexión mucho años después. Y también hay contradicciones en algunos recuerdos, lo que me hace pensar que no todos son de ella, si no más bien de conocidos, con el fin de intentar trascender la simple biografía y mostrar la manera de vivir en aquel país que odiaba a la gente de piel oscura. Aunque, en mi opinión aquí también aparece otra trampa. Y es que la familia de Maya era lo más alejado que podía existir de una familia típica negra de aquella época. De cualquier manera, pillas las intenciones de la autora demasiado rápido. Y esto unido a las extensas y profundas reflexiones sobre la condición racial y la feminidad, hacen que leer este libro sea una gran proeza. Y eso que no he hablado del final. El desenlace es abrupto, abierto y tan insatisfactorio como el libro en general.
En resumen, Yo sé porque canta el pájaro enjaulado es un libro prescindible y arrogante que pretende ser la biografía de una generación, pero que se pierde en detalles y divagaciones innecesarias que terminan por aburrir al desprevenido lector. Y no. Yo no sé por qué canta el pájaro enjaulado. Lo que sí me ha quedado claro, tras la lectura de este libro, es que el activismo político está lleno de maldad e hipocresía. Y es que es muy divertido ver como una persona que se queja amargamente de la segregación que sufre ella y su gente, le falta tiempo para hacerle lo mismo a los que son diferentes. Y es que si tú misma te encargas de remarcar las diferencias… ¿qué esperas que hagan los demás?