Resumen y sinopsis de El medallón de fuego de Carla Montero Manglano
Una antigua reliquia que marcará el curso de la Historia.
Una búsqueda trepidante por toda Europa.
Regresan los protagonistas de La Tabla Esmeralda.
Madrid, actualidad. Ana García-Brest, experta en arte, recibe la llamada de Martin, el joven y misterioso buscador de tesoros a quien conoció fugazmente durante la búsqueda de El Astrólogo en La Tabla Esmeralda. Han asesinado a un magnate italiano y un poderoso tesoro está en peligro: el Medallón de Hiram, una reliquia mágica que perteneció al arquitecto del templo de Salomón. Nadie conoce el paradero exacto de la pieza y Martin necesita la ayuda de Ana para encontrarla. Ambos emprenderán una trepidante búsqueda por toda Europa enfrentándose a infinidad de peligros, pues muy pronto descubrirán que ellos no son los únicos que desean hacerse con la reliquia.
Berlín, 1945. En los estertores de la Segunda Guerra Mundial, los destinos de cuatro personas están a punto de cruzarse con consecuencias imprevistas para el Medallón de Hiram: un sanguinario nazi que rastrea un Berlín en ruinas con la obsesión de hacerse con el medallón; un joven español, estudiante de arquitectura, que se ve envuelto en una intriga insospechada; un ingeniero alemán que está en el punto de mira del servicio de inteligencia ruso, y una francotiradora del ejército soviético que guarda un importante secreto.
¿Estás preparado para descubrir el secreto del Medallón de Fuego?
No supera a la primera entrega, pero no está mal. Hay misterio, persecuciones de distintas entidades dispuestas a conseguir el medallón de fuego, y una Eva García, nuestra protagonista, que pasará por muchas aventuras en su lucha por encontrarlo antes que los demás. El final es inesperado, sobre todo por cómo se desarrolla la historia a nivel personal para la protagonista. Por lo menos entretiene.
Demasiado farragoso.
Es una historia que viene de su otro libro “La tabla Esmeralda”, sin embargo, muchísimo mejor que este. La historia es similar: la búsqueda de una reliquia, “El medallón de fuego”, que ha ido pasando de mano en mano desde tiempos de Salomón, pasando por la Segunda Guerra Mundial, hasta el día de hoy que estaba bajo custodia de un magnate italiano recientemente asesinado.
Ana García-Brest, es la misma protagonista que en La Tabla Esmeralda, una experta en arte, que recibe la llamada de Martin, un buscador de tesoros que también sale en el libro anterior, para que le ayude a encontrar la pieza.
A partir de ahí empiezan a mezclarse épocas, personajes, sucesos, de forma tal que es complicado seguir el hilo. Los capítulos tampoco son demasiado cortos lo que dificulta aún más porque (dependiendo el ritmo de lectura), puede que solo leamos 1 capítulo al día y, a cada capítulo le corresponde una trama y están todas intercaladas, y hasta que se vuelve a una de ellas, se te ha olvidado de qué iba el tema.
Se necesita demasiada concentración para leer esta novela…
Continuación de La tabla esmeralda que, pese a ello, es entretenida y se lee muy bien y distrae. No hace falta haber leído la otra hace poco porque la autora sitúa al lector muy rápidamente. Se pasa un buen rato leyendo.