Resumen y sinopsis de El día en que todo cambió de Robin Morgan-Bentley
Un thriller psicológico palpitante, rebosante de tensión, sin héroes ni villanos: solamente víctimas.
Un accidente.
Parece un día como cualquier otro, pero todo está a punto de cambiar para Ben. En su camino al trabajo en la escuela, un hombre, en un acto final desesperado, se lanza encima de su coche, dando un vuelco a la vida del profesor en un solo y terrible instante.
Dos mundos que chocan.
Atormentado por la culpa y resuelto a limpiar su conciencia, traba amistad con la viuda del hombre al que atropelló y conoce también a su hijo de siete años, huérfano de padre, Max.
Tres vidas marcadas para siempre.
Unos y otros se apoyan para intentar superar la pérdida y el trauma, pero ¿podría ser que llegasen demasiado lejos? ¿De qué modo podría Ben seguir adelante después de haber causado la muerte de alguien?
Aunque se lee más o menos rápido gracias a la brevedad de los capítulos, la verdad es que la historia no tiene sorpresas y creo que no supo ahondar lo suficiente en determinadas situaciones. El comienzo es la mejor parte, pero luego, la frialdad que transmiten los protagonistas no ayuda a que sintamos empatía por ellos. El desenlace no es totalmente cerrado, pero es más o menos aceptable. En resumen: una lectura que no deja huella pero sirve para distraerse un rato.