- A pesar de las múltiples ventajas de los audiolibros, sus características no cubren todas las necesidades de las personas con discapacidad visual.
- El formato Daisy se desarrolló con el fin de mejorar la navegación de los audiolibros, haciéndolos así más accesibles para diferentes colectivos.
El fenómeno de los audiolibros está en alza: cada vez son más las personas que se rinden ante este formato de lectura. La posibilidad de escuchar en lugar de leer es, además de enriquecedora por añadirle a la experiencia la interpretación del narrador, beneficiosa para quienes presentan discapacidad visual o tienen problemas para comprender la información escrita derivados de trastornos del aprendizaje como la dislexia.
Ahora bien, ¿son suficientes las características de los audiolibros para suplir las necesidades de estos colectivos? La respuesta es no. Para optimizarlos y mejorar su accesibilidad surgió el formato Daisy, un sistema de audio que permite una fácil navegación por el contenido. Te hablamos de su historia, las categorías de audiolibro disponibles y los dispositivos en los que se puede escuchar.
¿Qué es Daisy?
Daisy es un formato de audiolibro que codifica la información para hacerla más flexible y navegable para las personas con discapacidad visual. El material cuenta con un índice y está organizado de forma clara y sencilla. Con el estándar Daisy también se pueden transformar al audio tablas, referencias, imágenes o gráficos, por lo que queda al alcance de los usuarios la lectura de libros más complejos como enciclopedias o libros de texto.
Entre sus avances frente a los audiolibros al uso está el hecho de que el lector puede desplazarse de secuencia en secuencia con rapidez y comodidad. Además es posible buscar en el texto, colocar marcadores, navegar línea por línea e incluso regular la velocidad del habla sin que con ello se distorsione la voz. Todas estas propiedades mejoran notablemente la experiencia de lectura de las personas con discapacidad, pues está diseñada especialmente pensando en ellas.
¿Y cómo surgió esta innovadora idea? En vista de los “vacíos” que presentaban los audiolibros a nivel de accesibilidad, en 1994 comenzó a desarrollarse una herramienta que ampliase las funcionalidades del formato. De este modo se originó Daisy, acrónimo de Digital Accesible Information System, traducido al castellano como Sistema de Información Digital Accesible.
Dos años después un grupo de bibliotecas de sonido fundó el Consorcio Daisy con el objetivo de difundir la iniciativa y optimizar la transición de audiolibros tradicionales al estándar Daisy. Al consorcio pertenecen numerosas organizaciones, entre ellas la ONCE. También están involucrados en el proyecto otros países como Suecia, Finlandia, Francia, Japón, Canadá, Alemania o Australia.
Categorías de audiolibros Daisy
Dependiendo del tipo de información que componga el audiolibro Daisy, estos se clasifican de la siguiente forma:
Solo audio: variante audioOnly. Los que pertenecen a esta categoría están compuestos solo por ficheros de audio, por lo que sus prestaciones no difieren mucho de las de un audiolibro convencional. Este tipo permite poner marcadores, pero su contenido no está indexado, así que la navegación por el material no es una posibilidad.
Audio con navegación: variante audioNCX. De todas las clases existentes de audiolibro Daisy, esta es la más popular y frecuentada. Los ficheros de audio disponen de índice y gracias a ellos se puede acceder a cualquier parte del libro, así como avanzar por él fácilmente.
Audio con navegación y contenido textual: variante audioPartText. En esta categoría toda la información está grabada en audio, pero además cuenta con ciertas partes en formato texto como podrían ser el índice, los datos bibliográficos y la sinopsis.
Contenido en audio y texto: variante audioFullText. Los audiolibros de esta variedad contienen todo el libro tanto en formato audio como en formato texto. La información está indexada y codificada para que ambos contenidos se puedan reproducir de forma sincronizada.
Texto con navegación y partes en audio: variante textPartAudio. En esta ocasión el libro está completamente en formato texto y algunas porciones cuentan también con grabación en audio. De todas las categorías es la menos utilizada.
Contenido textual con navegación: variante textNCX. El libro está compuesto únicamente por información en formato texto, no hay ningún fichero de audio. Este tipo se utiliza con unos reproductores especiales capaces de sintetizar el audio a partir de texto escrito.
Dispositivos y disponibilidad
Aunque el contenido en audio de los libros Daisy se puede escuchar en la mayoría de los reproductores del mercado, en estos soportes no se pueden aprovechar el resto de funcionalidades, que son precisamente las que hacen del formato un modelo accesible. Para su uso y disfrute es necesario, por tanto, emplear dispositivos de reproducción específicamente diseñados para los audiolibros Daisy.
El medio más común para este formato es el CD, que puede escucharse con un lector adaptado que dispone de diferentes botones con los que se navega por la grabación (adelante, atrás, pausa, reproducción, índice…). Con el tiempo también se han ido desarrollando algunas aplicaciones instalables en móviles y ordenadores con diferentes sistemas operativos.
En cuanto a su distribución, en España la única entidad que se dedica a la producción y distribución de libros Daisy es la ONCE. La organización ofrece a sus afiliados audiolibros Daisy tanto en soporte físico como en soporte digital a través de descargas por Internet.
Lectora empedernida desde que tiene uso de razón. Disfruta perdiéndose entre las hojas de cualquier buena historia que caiga en sus manos y compartiendo las reseñas de sus lecturas en su propio blog literario, donde da rienda suelta a sus opiniones.