Imaginad que hace cincuenta y dos años trabajáis en un campamento de verano. Como actividad para los chavales decides montar una especie de periódico o gacetilla. Te entregan algunos cuentos, unas noticias y un poema de dos páginas sobre la muerte de un perro. ¿Bien? Sin duda, publicar ese poema adolescente fue la mejor idea que pudiste tener. O quizás lo fue quedarte con el original escrito a bolígrafo.
Ese poema “oscuro y lúgubre” estaba firmado por Bobby Zimmermann, nombre que no le dirá nada a la mayoría, pero que es con el que nació uno de los más afamados músicos norteamericanos de nuestro tiempo: Bob Dylan.
Así que el poema, junto con otros lotes del mundo de la música como un póster de los Beatles firmado por los integrantes del grupo, o una guitarra de Kurt Cobain, entró a subasta en la famosa casa Christie’s donde, finalmente, se vendió por unos nada desdeñables 12.500 dólares que sin duda ayudarán a la jubilación del inteligente miembro del campamento de verano.
Así que, monitores del mundo, el próximo poema que os entregue un niño, escrito de su puña y letra, es mejor que lo guardéis en una carpeta dentro de la caja fuerte. Nunca se sabe si dentro de cincuenta años tendrás a un Dylan que vender, aunque viendo como va la cosa es más fácil que te acabes encontrando con un “Canto del loco” original.
Vía: Revista Ñ
Bob Dylan