- Carlos Zanón recupera el clásico personaje de Pepe Carvalho.
- ¿A quién pertenecen los personajes?
La vida de un personaje literario va íntimamente relacionada con la de su creador. Juntos comparten el éxito o el fracaso, las interminables sesiones de promoción, las tardes solitarias delante de la página en blanco. A lo largo de la historia de la literatura tenemos grandes ejemplos de personajes protagonistas que incluso han llegado a volver locos a sus autores, como es el caso de Sherlock Holmes, al que Arthur Conan Doyle decidió finiquitar tirándolo por unas cataratas, sin demasiado éxito, ya que para aquel entonces el detective británico era más famoso que el propio Doyle. Sin embargo, cuando un autor muere, ¿con qué derecho se puede revivir un personaje? ¿Acaso no es un acto de extrema intimidad?
El caso más reciente es el de Carlos Zanón y Pepe Carvalho. Este detective creado por Manuel Vázquez Montalbán sirvió como excusa para el periodista y escritor español para describir el tardofranquismo, la transición española y la decepción tras los primeros años del socialismo, desde una perspectiva ligada a la novela negra. Su inesperada muerte le impidió dar un final adecuado a este personaje, uno de los más populares de su tiempo. Ahora, Zanón, con el permiso de los herederos del autor y el interés de la editorial Planeta, recuperará al detective una vez más.
Zanón es uno de los autores actuales de novela negra más interesantes del panorama en castellano, y su visión de la Barcelona actual es muy interesante. ¿Será capaz de actualizar el desencanto y la acidez de Montalbán en la ciudad plagada de turistas que conocemos hoy en día? En realidad, ¿es necesario usar a Carvalho en lugar de disfrutar de una nueva novela de Zanón?
Lo cierto es que cada vez es más habitual encontrarnos con este tipo de resucitaciones. En los últimos años hemos visto cómo personajes total y absolutamente muertos y finiquitados por sus autores, como Poirot, eran sacados de la tumba por editores y herederos para sacar unos cuantos euros más, estirando una fama que, al fin y al cabo, no les pertenece.
El resultado de las continuaciones de este estilo suele ser decepcionante. En el caso de Poirot, apenas se llega al original, como podemos encontrar en otros personajes como Bond, que tras Ian Fleming no recuperó nunca el mismo interés. En el caso de Holmes también se hicieron continuaciones autorizadas, en muchas ocasiones peores que las no oficiales. Y para qué hablar de las historias de Jason Bourne, que van saliendo una tras otra con puntualidad matemática pese a la muerte de su creador.
Así pues, teniendo en cuenta que parece más importante el seguir éxitos pasados y comprobados que crear nuevas historias, ¿qué personajes esperáis ver de nuevo? ¿Cuánto pagaría alguien por ver a Frodo y Sam en El Señor de los Anillos II? ¿Cómo es que nadie está siguiendo las obras de Dupin? Os diría que estaría bien una nueva historia de Marlowe, pero ya la han sacado. Quizá va siendo hora de más aventuras de Sam Spade. ¿Y en el momento que Andrea Camilleri no pueda seguir escribiendo? ¿Acaso la editorial se encargará de encontrar a alguien que siga escribiendo las aventuras de Montalbano?
Perdonad mi franqueza en este sentido, pero a mí no deja de parecerme un engaño, una manera de apelar a la nostalgia, que parece una de las grandes tendencias de la actualidad. Todo tiempo pasado fue mejor, así que seguimos ofreciendo lo mismo que entonces. De esa manera, en mi opinión, se cierran nuevas oportunidades para conformar un presente adecuado.
¿Y vosotros? ¿Os gusta leer este tipo de continuaciones? ¿O preferís descubrir cosas nuevas? Os esperamos, como siempre, en los comentarios.
(Valencia, 1975) escribe bordeando territorios fronterizos, entre sombras y engranajes, siempre en terreno de sueños que a veces se convierten en pesadillas. Actualmente es el Coordinador de la red social Lecturalia al mismo tiempo que sigue su carrera literaria.