Seis escritores superventas que fueron rechazados

• Muchas editoriales rechazaron sus primeras obras y hoy se arrepienten.
• El éxito en la literatura suele ir unido a la constancia.

¿Cómo? ¿Qué mi libro no entra en su línea editorial? Pues en alguna otra encajará. Eso es lo que estos autores pensaron en su momento y no se dejaron amedrentar ni deprimir por muchas notas de rechazo que recibieran de las editoriales donde mandaban sus originales. Y es que el camino que un original recorre en su vida editorial suele ser largo y tortuoso, que nadie piense que triunfar, tanto en el mundo de la literatura como en cualquier otro, se consigue a la primera. Hay que trabajar, insistir y mejorar; solo creyendo en uno mismo se consiguen el mejor de los resultados, y estos escritores son la mejor muestra de ello.

Agatha Christie pasó cinco años mandando sus escritos sin conseguir que alguien le publicara. Seguramente muchas de esas editoriales que la rechazaron ya no existen, pero la obra de Christie ha generado ventas por más de dos mil millones de dólares y es considerada una de las autoras más leídas de la historia.

Doce rechazos consecutivos pueden desanimar a cualquiera, sobre todo si estás tratando de colocar tu primer libro, una fantasía para niños. Pero J. K. Rowling logró colarse por casualidad en la importante Bloomsbury, gracias a que el hijo de ocho años de uno de sus editores se quedó encantado con el manuscrito. Hoy en día la serie completa de Harry Potter es la más vendida de la historia. Y todavía sigue acumulando cifras.

Dan Brown ya había publicado un par de libros con poco éxito de ventas, pero cuando trató de colocar El código Da Vinci recibió una nota demoledora: Lo sentimos, pero es que está tan mal escrito… Sí, la verdad es que Brown no destaca por su estilo literario, pero a día de hoy ha vendido más de 80 millones de copias. Creo que guarda esa nota de rechazo con mucho cariño.

Paulo Coelho publicó El Alquimista y logró vender… 800 ejemplares. El editor descartó hacer una segunda tirada, lo que llevó al autor brasileño a buscar una nueva casa para su libro. A día de hoy ronda los 75 millones. A veces no solo es el autor el que tiene que insistir con un libro, sino también el editor.

Pero esto no solo le ha pasado a autores de género o dedicados al thriller superventas. Vladimir Nabokov vio como nadie en Estados Unidos o Inglaterra se atrevía con Lolita, recibiendo comentarios como Recomiendo que esta novela sea enterrada bajo una piedra durante más de mil años. Viajó a Francia, donde el libro se publicó con gran éxito. Pocos meses después todos se peleaban por Lolita, llegando a vender más de 50 millones de copias.

Herman Melville insistió pese a las numerosas notas de rechazo. Su novela más conocida, Moby Dick, logró ser publicada finalmente en una corta tirada de 3000 ejemplares, de los cuales solo 50 de ellos fueron vendidos en vida de Melville. Hoy en día, sin embargo, su legado es inmortal.

¿Qué os parece? ¿A que no os imaginabais que Agatha Christie o Nabokov habían sufrido para publicar sus novelas? A veces un rechazo no es más que la oportunidad de encontrar un lugar mejor para nuestros libros.