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Bibliotecas secretas de la historia: Las Mil Grutas de Buda

AutorAlfredo Álamo el 5 de septiembre de 2016 en Divulgación
  • Permaneció escondida en los límites del desierto de Gobi.
  • Estuvo sellada más de mil años.

Imágenes de una de las cuevas de Las Mil Grutas de Buda.

Hace siglos, ante amenazas tan grandes como la guerra, la peste o un desastre natural de gran magnitud, un bibliotecario se podía enfrentar a una dura decisión: intentar trasladar la colección de tesoros que tenía a su cargo o bien ocultarlos para que fueran recuperados más tarde. Está claro que la primera opción era muy complicada para la época, así que a lo largo de la historia la segunda opción se usó en numerosas ocasiones. ¿El problema? Que a veces ese secretismo era tan grande que podía pasar casi un milenio hasta que alguien recuperaba los libros. Ese fue el caso de la biblioteca oculta en las Mil Grutas de Buda.

Cerca del desierto del Gobi se alzan las Mil Grutas de Buda, en la región china de Dunhuang. Una formación rocosa atravesada por miles de galerías y cuevas que han sido durante siglos lugar de refugio y escondite para toda la zona en momentos de peligro. Todavía hoy quedan rincones inexplorados.

En el año 1900, el monje taoísta Wang Yuanlu, que llevaba toda su vida como guardián de las cuevas, hizo un descubrimiento asombroso mientras exploraba una nueva sección de las grutas, una cámara llena de manuscritos que la posterior datación situó desde el siglo IV hasta el XI. Todo un hallazgo que atrajo el interés de la comunidad internacional, pero que las autoridades chinas de la época descartaron en un primer momento.

El explorador húngaro Aurel Stein logró comprar 10 000 de los manuscritos antes de que delegaciones provenientes de media Europa visitaran las cuevas, llevándose numerosos ejemplares. En 1910, el gobierno chino decidió preservar gran parte de su legado y se llevó la mayor parte a Pekín. Solo una quinta parte del material original quedó en las cuevas.

La cueva estuvo sellada durante casi mil años, una biblioteca secreta que contenía tesoros incalculables, como el primer mapa de estrellas completo del mundo, textos ancianos hebreos, diarios de viajeros que seguían la ruta de la seda, contratos entre comerciantes de todo el mundo y libros sobre adivinación, magia y religión.

Las razones de ocultar esta biblioteca no están claras, se habla incluso de que podía ser el expurgo de una colección más grande, aunque es posible que se debiera a la invasión de Dunhuang por parte de la dinastía Xi Xia o bien por el miedo a los ataques de la dinastía turca de los Qarajanidas.

En cualquier caso, es un legado fantástico, alejado del mundo durante mil años, y que ahora está siendo digitalizado gracias a un proyecto liderado por la Biblioteca Británica, que busca los originales por todo el mundo, incluyendo el Sutra del Diamante, uno de los textos clave del budismo y cuya copia en la cueva data del 868, siendo el libro impreso completo más antiguo del que se conoce su edad.

Alfredo Álamo

(Valencia, 1975) escribe bordeando territorios fronterizos, entre sombras y engranajes, siempre en terreno de sueños que a veces se convierten en pesadillas. Actualmente es el Coordinador de la red social Lecturalia al mismo tiempo que sigue su carrera literaria.

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