Lecturalia Blog: reseñas, noticias literarias y libro electrónico 112.540 libros, 24.650 autores y 91.903 usuarios registrados

Todo se aprovecha (II)

AutorJuan Manuel Santiago el 9 de abril de 2013 en Divulgación

Chandler, Black Mask

En una entrada anterior veíamos el problema tan tonto que se buscó Jonah Lehrer por autoplagiarse, es decir, copiar y pegar artículos suyos ya publicados y tratar de colocarlos como material inédito en el blog de The New Yorker. Acabó costándole la dimisión de la revista, y es más que seguro que su carrera como periodista científico.

Pero bueno, busquémosle el lado lúdico al asunto. Amigos escritores que me están leyendo, siempre pueden canalizar su pereza y desidia de maneras más creativas, como por ejemplo canibalizando textos a la manera de Raymond Chandler, quien, es cosa sabida porque él mismo lo convirtió en una de sus señas de identidad, se dedicó a reconvertir sus relatos pulp de las revistas Black Mask y Dime Detective Magazine nada menos que en novelas tan emblemáticas como El sueño eterno, Adiós, muñeca, La ventana siniestra, La dama del lago o La hermana pequeña. Claro está, hablamos de formatos diferentes, y aunque la alambicada mente de Chandler hizo que algunas novelas fueran canibalizaciones de diferentes partes del mismo relato, no dejó de haber una labor de ampliación y de trabajo extra. Que se lo curró, vamos.

Algo similar hizo el Philip K. Dick más desquiciado de la década de 1960, los de las fiestas en las que alardeaba de haberse tomado hasta cien pastillas y los años en los que tranquilamente podía escribir media docena de novelas. En La pistola de rayos, por ejemplo, a la trama general le añade nada menos que un relato entero que pasaba por ahí, Veterano de guerra, y varios fragmentos de otros relatos.

Queda una última manera de aprovechar material propio como quien se hace los canelones el día de san Esteban (lo que nos llevaría a hablar de canelonización, como guiño a la canibalización chandleriana), mucho más cansada pero también más constructiva. Supongamos que has escrito un tecnothriller de mil páginas bastante ramplón, pongamos por caso El quinto día, en el que, a la manera de una peli apocalíptica de Roland Emmerich o de Michael Bay, el alemán Frank Schätzing nos narra un sinfín de catástrofes originadas por el escaso cuidado que le profesamos al medio marino. (Nótese el uso indisimulado de la teoría de Gaia; ya saben, la Tierra es un ser vivo que toma sus propias decisiones y nos va a eliminar como a parásitos molestos si le tocamos los ecosistemas.) Pues bien, Schätzing tomó una decisión que aplaudimos: después de haberse pasado unos cuantos años acumulando bibliografía sobre geología y biología marinas, escribió un monumental ensayo de divulgación científica, Noticias desde un universo desconocido, que es una auténtica maravilla para lectores profanos como yo y, supongo, ustedes. Bien narrado, supongo que bien documentado y, sobre todo, muy útil. Schätzing no llega a autoplagiarse (bastante tiene con la denuncia del biólogo marino y periodista alemán Thomas Orthmann, quien afirma que le ha fusilado unos cuantos artículos palabra por palabra), pero aprovechó los centenares de obras que leyó mientras preparaba El quinto día para escribir una obra relacionada (spinoff, dirían los más modernos) que es, a todas luces, mucho mejor que la novela original.

¿Qué más casos conocen ustedes de autoplagios, autoanarroseos, canibalizaciones y canelonizaciones literarios?

Autores relacionados Autores relacionados:
Frank Schatzing
Philip K. Dick
Raymond Chandler
Libros relacionados Libros relacionados:
El quinto día
La dama del lago
La pistola de rayos
Noticias desde un universo desconocido

No se puede comentar esta entrada