4 libros escritos a cuatro manos

• Escribir un libro es una tarea compleja y más cuando se escribe entre dos personas.
• Te presentamos 4 libros de diferentes géneros que se han escrito a cuatro manos.

Escribir un libro no es tarea fácil. No basta con tener una buena idea —aunque es un buen comienzo, claro está—, también hay que saber desarrollarla adecuadamente y, para ello, se necesita organización, planificación, constancia y, no menos importante, talento con las palabras. Si ya de por sí es complicado para un autor crear una obra de la nada, ¿te imaginas que en el proceso estuviera implicada otra persona? No hace falta tirar de la imaginación, puesto que esto ocurre en la realidad con los libros escritos a cuatro manos.

¿Qué significa escribir a cuatro manos? Ventajas y desventajas

Escribir a cuatro manos significa que en la escritura del libro participan dos personas. Normalmente ambos escritores se conocen desde hace tiempo —son pareja, amigos o, simplemente, su estilo creativo encaja lo suficiente como para lanzarse a la aventura— y, en algún punto de sus trayectorias literarias, deciden crear una historia (o varias) juntos.

Las ventajas de este tipo de escritura son numerosas. Para empezar, el doble de personas implica el doble de ideas, por lo que la colaboración da pie a que surjan opciones más interesantes y originales que si se escribiera en solitario. Asimismo, los escritores pueden actuar como una suerte de corrector el uno del otro, lo que implica que la escritura se va puliendo poco a poco conforme se escribe. También es una manera de mejorar las habilidades personales de trabajo en equipo, que son muy útiles en diversas esferas de la vida, especialmente la laboral. Por otro lado, la escritura a cuatro manos permite conocer los propios puntos fuertes y débiles y aprender de los conocimientos, aptitudes y estilo del compañero. Tampoco hay que olvidar que, acompañado, la escritura se vuelve una actividad más divertida.

En cuanto a las desventajas de escribir a cuatro manos, la principal es tener que ponerse de acuerdo con otra persona en todos los aspectos creativos: la estructura del texto, la construcción de personajes, la ambientación, el género, el título, las escenas… La obligación de compaginar dos formas diferentes de escritura puede ralentizar considerablemente el ritmo de escritura, y más si es la primera vez que se colabora; si se escriben otros libros juntos, este inconveniente va reduciéndose, ya que se van compenetrando mejor historia a historia. Otro punto negativo es que, como ocurre con cualquier otro trabajo, las tensiones que se generan durante el proceso pueden derivar en la pérdida de la relación, ya no solo profesional, sino también personal.

Libros escritos a cuatro manos

Una vez expuestos los beneficios e inconvenientes de crear tándems literarios, es momento de conocer 4 libros que se han escrito a través de esta práctica. En algunos de ellos los autores firman cada uno con su nombre y, en otros, han decidido inventar un seudónimo común con el que publicar.

En el ámbito nacional unas escritoras fundamentales de este estilo de escritura son Iria G. Parente y Selene M. Pascual, que publican solo historias escritas a cuatro manos. Se conocieron en 2006 a través de un foro de Internet y comenzaron a escribir juntas; desde que un sello editorial las publicara en 2014, las autoras han cosechado una larga y exitosa trayectoria en el ámbito de la literatura juvenil. El último libro que ha visto la luz de su puño y letra es Seremos el huracán, un retelling del Mago de Oz ambientado en el Nueva York actual y que sigue los pasos de Dorothy, una joven cuyo gemelo, Theo, acaba de fallecer. De repente, se le presenta la oportunidad de cumplir el sueño que ambos compartían: iniciar una carrera musical. Para ello, ella tendrá que fingir ser su hermano y trabajar para encajar con un grupo de tres chicos, con quienes va a formar una nueva boyband.

Quienes también forman un tándem perfecto son los estadounidenses Lincoln Child y Douglas Preston, que además publican libros por separado. Los géneros en los que se mueven estos autores son la novela policíaca y el thriller. De la producción que han escrito juntos, su saga más famosa es la protagonizada por el inspector Pendergast, que cuenta con más de veinte entregas. Sin embargo, en 2022 comenzó a publicarse en castellano su colección más reciente, las novelas cuyas investigaciones envuelven a la arqueóloga Nora Kelly. En la primera entrega de la serie, Huesos olvidados, a Kelly le proponen liderar un equipo en busca del llamado «Campamento perdido» de la expedición Donner. El caso ocurrió en 1847, cuando un grupo de pioneros quedó atrapado en las montañas de California y tuvieron que sobrevivir como pudieron, llevando a cabo prácticas como el canibalismo. Ahora, el equipo de Nora ha descubierto el diario de una de las víctimas que puede ser la clave para descubrir dónde está el enigmático campamento.

En cuanto a Camilla Läckberg y Henrik Fexeus, configuran un tándem literario de lo más particular. Ella es la afamada escritora de Los crímenes de Fjällbacka y él es un reputado mentalista y presentador sueco. Sea como fuere, la combinación de ambos ha dado lugar a una exitosa serie de literatura policíaca que, libro a libro, consigue conquistar a más y más lectores. La primera novela que vio la luz a partir de esta colaboración fue El mentalista, que arranca con la aparición de un cadáver en un parque de atracciones a las afueras de Estocolmo. Quien se encarga del caso es la agente de policía Mina Dabiri, que crea un equipo especial de investigación para descifrar el misterio. Cuando no es capaz de encontrar la solución, recurre al mentalista Vincent Walder, ya que todo indica que el crimen está relacionado con el mundo del ilusionismo. De este modo nace la asociación entre Dabiri y Walder, que sigue en marcha en otros títulos como La secta.

En la literatura romántica también podemos encontrar autores que se alían para escribir historias juntos, como hicieron Christina Hobbs y Lauren Billings tras conocerse en 2009 gracias al mundo del fanfiction. Cuando empezaron a desarrollar novelas juntas, decidieron firmarlas bajo el seudónimo Christina Lauren, que toma el nombre de una y el apellido de la otra. Muchos han sido los títulos que han publicado ambas autoras, de entre los que destacamos la última de sus obras: Una aventura salvaje. A lo largo de sus páginas conocemos a Lily Wilder, hija de un famoso cazador de tesoros que utiliza sus mapas para estafar a turistas, guiándolos por los cañones de Utah en falsas búsquedas del tesoro de Butch Cassidy. Inesperadamente, este trabajo la lleva a reencontrarse con su exnovio, Leo, que está dispuesto a dar con el botín junto a un grupo de amigos.

Como has podido comprobar, hay autores que han conseguido sobreponerse a las dificultades que surgen de la escritura a cuatro manos, dando lugar con ello a historias no solo increíbles, sino también exitosas. Y tú, ¿conoces más libros escritos por más de un escritor?