- El autor irlandés nos trae una nueva entrega de Charlie Parker.
- Terror y novela negra en una combinación imbatible.
Pocos autores contemporáneos han sido capaces de aprovechar tanto un personaje como John Connolly con el detective Charlie Parker. El frío de la muerte supone el libro que hace 16 dentro de la serie que comenzó con Todo lo que muere, y que se ha convertido en un caso de lo más curioso, uniendo a seguidores de novela negra y literatura fantástica por igual.
Charlie Parker es un detective atormentado con la pérdida de su familia, rodeado de un misterioso destino que avanza poco a poco con cada libro. De hecho, hay dos tipos de libros de Parker, aquellos que se centran más en él y su lugar en un futuro apocalipsis, y lo que se adentran en extraños mitos y sectas estadounidenses. El frío de la muerte estaría más cercano a este segundo punto.
Y es que hay que ver la serie de Parker como una gran serie de televisión en la que el arco principal se insinúa de vez en cuando, dándonos migajas de vez en cuando, pero con episodios cerrados que nos fascinan. El frío de la noche tiene la dosis justa de Parker, de su enigmática hija Rachel, y también de una secta misteriosa que parece culpable de decenas de asesinatos: Los hermanos. Aunque… no es una secta al uso, como descubrirá el lector a medida que avance.
Louis y Ángel, los inseparables compañeros de Parker, vuelven a aparecer en la novela, esta vez mejor perfilados, sin caer en lo que en otros libros podría ser un deus ex machina constante, ya que son dados a resolver cualquier tipo de problema que se les ponga por delante con una eficiencia demasiado sobrada. Aquí están cuando se les necesita y algo que le pasa a Ángel humaniza más a la pareja.
La historia comienza con una petición del FBI… fuera de los registros oficiales. La desaparición de un investigador privado ha hecho saltar algunas alarmas y Parker es el encargado de averiguar qué le ha pasado. Su búsqueda hará que ciertas personas se fijen en él y, como viene siendo habitual, se arrepientan de cruzarse en su camino.
Al mismo tiempo, se profundiza en el poder que su hija puede ejercer sobre el mundo, mientras su relación con su exesposa está más tensa que nunca. También aparecerá, como en otros libros, el espectro de su hija muerta.
Para los aficionados a la obra de Connolly, El frío de la muerte es un libro indispensable, sobre todo por avanzar en la trama del Coleccionista. En cuanto a aquellos que no lo conocen, quizá empezar por el libro 16 sea algo complicado, pero hay que valorar que Connolly deja caer muchas explicaciones redundantes que permiten disfrutar del libro pese a no tener muy clara la línea argumental al completo.
John Connolly
El frío de la muerte