Las 10 reglas de Margaret Atwood para escribir

• La autora de El cuento de la criada ofrece su experiencia.
• Es una de las escritoras contemporáneas más valoradas.

Aunque parece que Margaret Atwood ha saltado a la primera plana literaria gracias a la adaptación televisiva de algunas de sus obras, como El cuento de la criada, lo cierto es que es una figura necesaria para comprender la literatura contemporánea anglosajona de los últimos 30 años. Por eso es interesante ver cuáles son sus consejos principales a la hora de ponerse a escribir.

• 1. Coge un lápiz si vas a escribir en un avión. Los bolígrafos y las plumas gotean, pero si el lápiz se rompe no hay más que sacarle punta. Pero como igual no te dejan subir algo afilado, mejor lleva dos lápices.
• 2. Si los dos lápices se rompen, inténtalo con un afilauñas.
• 3. Lleva siempre algo encima para escribir. El papel está bien. En un apuro, trozos de madera o tu propio brazo servirán.
• 4. Si estás usando un ordenador, haz una copia de todo lo que escribas en una llave de memoria.
• 5. Haz ejercicios de espalda. El dolor distrae.
• 6. Capta la atención del lector. Pero como no sabes quién va a ser el lector, será buscar un gato negro en una habitación a oscuras.
• 7. Vas a necesitar un tesauro, un libro de gramática básica y un ancla de realidad. Esto último quiere decir que no existen las comidas gratis. Escribir es trabajo, pero también es jugártela. No tienes un plan de pensiones. Otras personas podrán ayudarte, pero, esencialmente, estás solo. Nadie te hace escoger esto, así que no lloriquees.
• 8. Nunca vas a poder leer tu propio libro con la anticipación inocente que viene con esa primera y deliciosa página de un libro nuevo, porque tú las escribiste. Has estado entre bambalinas. Has visto esconder los conejos dentro del sombrero. Pedirle a un amigo que le pegue un vistazo o dos a la novela antes de que salga al mundo editorial es una buena idea. Es mejor que no mantengas una relación romántica con ese amigo, a menos que quieras romper.
• 9. No te sientes en mitad del bosque. Si estás perdido en el argumento o bloqueado, vuelve atrás, revisa tus pasos y mira dónde te equivocaste. Entonces, coge otro camino. Cambia el personaje. Cambia el tono. Cambia la primera página.
• 10. Rezar puede funcionar. O leer otra cosa. O una constante visualización del santo grial que es la versión terminada y publicada de tu brillante libro.

Vía: Brainpickings