Las tres muertes de Fermín Salvochea, de Jesús Cañadas

• Notable obra que mezcla historia y fantasía.
• Muestra un Cádiz oculto y fascinante.

No es fácil hacer carrera literaria en España escribiendo literatura fantástica. Es una carrera de fondo en la que no todos pueden seguir el ritmo. Uno de los escritores que está logrando labrarse un nombre cada vez más conocido es el gaditano Jesús Cañadas, que con Las tres muertes de Fermín Salvochea ha logrado quizá su mejor obra hasta el momento.

Ambientada a caballo entre finales del siglo XIX y principios del XX, una época cargada de conflictos sociales y políticos, Las tres muertes de Fermín Salvochea nos lleva a una doble historia: por un lado las aventuras de Juaíco, el mejor barbero de Cádiz, y su relación con el enigmático alcalde de la ciudad, Fermín Salvochea, y por otro las andanzas de su hijo y sus amigos en busca de resolver un peligroso misterio.

Salvochea fue un personaje real de la historia de Cádiz. Hombre de buena familia, ilustrado y anarquista, llegó a la alcaldía de Cádiz tras un pasado militar y rebelde, siendo líder del cantonalismo en la ciudad y alcalde durante la I República, aunque posteriormente fue condenado a cadena perpetua por sus ideales políticos. Tras la muerte de Alfonso XII volvió a Cádiz aprovechando una amnistía -pues se había fugado a Marruecos-, donde volvió a formar parte del movimiento anarquista.

Digamos que la historia de Salvochea es, de por sí, épica. Un personaje mítico que Cañadas lleva un paso más allá, insertándolo con precisión en un Cádiz irreal y fantástico, creado a partir del rico folclore que tiene esta hermosa ciudad andaluza. Así pues, nos encontramos con una narración que se decanta por mezclar fantasía y realidad, historia y ficción, realismo y fantasía.

Ahí es donde Cañadas se la juega. Uno de los grandes problemas que muchos lectores en castellano tienen es en esa mezcla que parece querer engañarles a traición. La recreación histórica es magnífica, así como el ambiente a base de diálogos y la peculiar gama de palabras gaditanas que salpican y dan color al texto. Pero a esa recreación realista se une una explosión de terror y fantasía, narradas con la misma naturalidad que el resto de la acción. Y eso, a algunos lectores, le rompe los esquemas.

Algo que nos parece normal en un relato de Stephen King, convirtiendo su realista pueblecito americano en un lugar donde se alzan los muertos, nos choca al ver algo parecido saliendo del Cádiz de 1907. Sin embargo, la narración no engaña, no es abrupta y está cargada de imaginación, usando con inteligencia las leyendas propias de Cádiz, que no son pocas.

Las tres muertes de Fermín Salvochea es uno de los mejores libros de literatura fantástica de los últimos años, y si muchos lectores de novela histórica se deshacen de sus prejuicios, sería para ellos una obra a tener en cuenta por su excelente retrato de una época fascinante.