Providence, de Alan Moore

• Moore se atreve con las grandes historias de H. P. Lovecraft.
• Es un viaje por unos Estados Unidos secretos y diferentes.

En la última década, la obra de H. P. Lovecraft ha cobrado relevancia gracias al trabajo de numerosos escritores que han encontrado en su visión del horror cósmico una referencia común, capaz de unir elementos fantásticos, literatura posmoderna y cultura popular. Uno de los principales valedores de la obra de Lovecraft ha sido Alan Moore, uno de los guionistas de cómic más importantes de la actualidad, renovador del género y autor de obras tan conocidas como Watchmen, V de Vendetta o La liga de los hombres extraordinarios.

Aunque ya había tratado temas lovecraftianos con anterioridad, donde destacaría su Relatos de Yuggoth y otras historias o Neonomicon, Moore acomete en Providence una visión de Lovecraft diferente, desde una perspectiva externa a su obra, pero usando sus relatos e imaginería en una historia propia. Con Jacen Burrows a los lápices, siguiendo esa línea sencilla que tanto gusta a Moore, nos encontramos ante una mezcla de géneros, una visión que une la intriga con el terror y la fantasía.

Robert Black es un periodista de origen judío que vive en Nueva York, donde trata de llevar en secreto su orientación sexual. Tras una entrevista sobre un libro misterioso, capaz de causar la locura como el mítico Rey de Amarillo, inicia una investigación que le llevará por algunos de los lugares más curiosos de la geografía estadounidense, herederos directos de las narraciones de Lovecraft. Hermandades secretas, mujeres misteriosas traídas de lejanas tierras, tradiciones ocultistas… obsesiones de Moore y de Lovecraft que se mezclan en este cómic, indispensable para seguidores de ambos autores.

Como es habitual en la obra de Moore nos encontramos con una parte extra de información escrita, en esta ocasión en forma de fragmentos del diario de Black, en los que ahonda sobre su extraño y, en ocasiones, desconcertante viaje. En conjunto, una obra interesante que en este primer tomo usa temas sacados de La sombra sobre Innsmouth, El color que vino del espacio, El modelo de Pickman o Aire frío.