- Aplicaciones como Hooked se han hecho muy populares.
- Cuentan historias adaptadas a un nuevo medio.
Además de los libros tal y como los conocemos, existen nuevas formas de contar y de leer historias. Las nuevas generaciones pasan más rato delante de sus teléfonos que de los libros de la misma manera que la televisión tradicional está siendo arrinconada por YouTube y los servicios de streaming. Así que no podemos extrañarnos de la aparición de nuevas formas narrativas que se adaptan a los tiempos que corren, convirtiéndose en todo un éxito de ventas a través de mecanismos muy sencillos.
Ya os hemos hablado de Rapids, una iniciativa de Amazon que transforma a formato de mensajes de texto grandes clásicos de la literatura, en un intento de captar a los más jóvenes. Sin embargo, han aparecido más aplicaciones que juegan mejor con el mundo del Whatsapp o Telegram. La más famosa de todas es Hooked.
Hooked devuelve al teléfono una de las principales características de la literatura popular del siglo XIX, el serial. Para que os hagáis una idea, en Hooked sigues una historia contada a través de un chat, pero no es un libro o un relato, no, es una conversación a la que asistes, viendo cómo se desarrolla la acción. Y justo cuando va a pasar algo realmente emocionante se corta: para seguir leyendo tienes que pagar. Las continuaciones se compran en paquetes para avanzar un buen rato y poder enganchar al lector.
Esta app ha logrado un gran éxito de ventas y descargas, convirtiéndose en toda una sorpresa dentro del mercado editorial. Copiando su éxito han aparecido otras muy similares, como Hoot, que imita el formato SnapChat y que apuesta por el formato de suscripción. La idea es ofrecer historias muy intensas, con giros sorprendentes y de una extensión reducida, para que se puedan leer en un momento.
A partir de ahí hay otras apps que juegan con el sistema de chat. De entre ellas yo destacaría Adela. La historia parte de que recibes un whatsapp de un número desconocido. Es una chica que se llama Adela, acaba de tener un accidente de tráfico y sólo tú puedes ayudarla. Tiene más de 13.000 líneas de texto programadas para que vaya avanzando a través de tu propia guía. Se desarrolla en tiempo real y puedes poner las notificaciones para que la sensación sea más realista. En teoría, este libro-juego dura una semana.
¿Qué os parece esta literatura transmedia? Son nuevas narraciones para un nuevo modelo de lectura, que no pretenden más que entretener, como gran parte de la literatura popular. No tienen mayores pretensiones, aunque es cierto que nadie sabe cómo puede evolucionar en un futuro, sobre todo con el desarrollo de redes neuronales e inteligencia artificial.