VLC Negra: ‘Una de las funciones del escritor es precisamente poner el dedo en la llaga’

• VLC Negra se celebra del 6 al 15 de mayo.
• Más de 3000 personas han acudido ya a los actos.

Valencia Negra se ha convertido en una de las citas clave dentro de la novela de género en España. Aprovechando un descanso entre actos, hemos entrevistados a sus tres cabezas pensantes, Jordi Llobregat, Santiago Álvarez y Bernardo Carrión. La verdad es que no es nada fácil montar un festival dedicado a la cultura, y mucho menos coordinar las decenas de charlas, conciertos, mesas redondas y encuentros que han montado este año. Por suerte, hemos podido atraparlos a la vez y compartir un café. La primera pregunta está clara: ¿Cómo os habéis atrevido con VLC Negra? ¿cómo os habéis lanzado a esta cuarta edición?

Jordi Llobregat (J): Algo fundamental que se llama inconsciencia, sobre todo distanciamiento con la anterior. Lo cierto es que acabaremos el domingo odiando el festival o casi, queriendo no saber nada de festivales durante un tiempo, pero cuando pasa el verano ya estás pensando en ello. De hecho ahora ya estamos pensando y trabajando para la siguiente edición porque hay ciertas gestiones sobre todo a nivel internacional que duran más de un año. Lemaitre nos ha costado dos años, o sea que si no trabajas todo ese tiempo no se puede. Lo cierto es que la ilusión ocupa el espacio de la fatiga y olvidas todo lo malo. Supongo que se acabarán las ganas cuando se acabe la ilusión.

Bernardo Carrión (B): Son ganas constantes de superarnos, cuando estamos preparando el festival hacemos unas listas de autores que son descomunales. Y vas quitando, pero es imposible, miras nombres y dices “no me cabe”. Llenas todos los huecos del festival e incluso hemos llegado a solapar actos, que es algo que no nos gusta, pero bueno, es que si no al final no puedes hacer el festival como crees que tiene que ser.

J: También es verdad que en estos cuatro años hemos ido creciendo hacia donde queríamos llegar, este año hemos tocado la luna que estábamos buscando, que era tener una figura como Lemaitre. Hemos tenido grandes figuras antes, claro, como Markaris o Yasmina Khadra, y por no decir las nacionales. Pero traer a un Premio Goncourt como Lemaitre es algo más. Ese salto, que era un lugar al que queríamos llegar, hemos empezado este año y lo queremos continuar. Tener dos “Lemaitres” en lugar de uno, el año que viene. Son cosas de este tipo, queremos traer gente que difícilmente podrías ver en Valencia en otras circunstancias. Por ejemplo, ese es uno de nuestros objetivos. Mejora el conocimiento de la gente, del autor local, eso se está mejorando. Esa es la combinación del festival, figuras internacionales, figuras normales y la gente de aquí, al hacer esa mezcla estás aportando mucha vida al mundo literario valenciano, que es lo que nos importa.

B: Edición tras edición vas aprendiendo cosas, que no haces todo lo bien en una edición, pero en la siguiente, como ya te acuerdas de lo que has hecho mal, pues mejoras y lo vas corrigiendo.

J: Más o menos. (risas)

Es el espíritu de mejora.

B: El primer año hicimos una lista de cagadas, para decir esto no ha salido como pensábamos. Una lista que no sabes si reduces o modificas, pero todo va mejorando.

Lecturalia (L): Este año tiene datos de asistencia muy buenos, pasando en una semana de 2500 personas con grandes actos. Ampliación de actividades, cambio de la sede principal para actos principales de la Sala Ruzafa a la Fundación Bancaja. ¿Puede afectar esta dispersión al festival?

B: Siempre hemos trabajado con varias sedes, aunque sí que es cierto que la Sala Ruzafa es la principal.

J: Es la única que tiene cuatro actos semanales y queremos que siga siendo principal. El ambiente que se crea allí es muy cálido, es muy especial, los escritores lo valoran mucho, no queremos renunciar. Pero en el caso del acto de Lemaitre era inevitable irse a otra sede porque no queríamos que nos volviera a pasar lo de Markaris, cuando se quedaron doscientas personas en la calle. Este año, pese al cambio, se han quedado unas 50, y eso que la sala es el doble de grande. Un millar de personas ha acudido a actos literarios. El día de Lemaitre miraba la sala llena y era impresionante. Me emocionó.

B: Estamos orgullosos en Valencia que un señor como Lemaitre que ha recorrido el mundo a nivel literario te diga que esto sólo lo ha visto en unos pocos festivales internacionales. No tanto por nosotros, sino porque buscamos un festival de Valencia.

J: Es un producto creado para la ciudad. Es un orgullo que tenga un festival como el de Valencia Negra y ofrecer esa imagen.

B: Lo que queremos es que vaya Lemaitre y se lo diga al resto de autores y editoriales.

L: Quería preguntaros cómo es vuestra relación con las editoriales, sobre todo en estos tiempos de crisis.

J: Las editoriales… nos hemos ganado su confianza a lo largo de estos años, creo que por el trabajo bien hecho.

B: Y que hemos colaborado muy bien. Todo esto no es posible sin el apoyo editorial y lo que te queda a ti es hacerlo lo mejor posible, que el autor se vaya contento, como las editoriales, para que el festival tenga un futuro.

J: Es verdad que además hay editoriales que son más inteligentes que otras. Las hay que se dan cuenta de lo que significa el festival y han realizado acciones de promoción en paralelo a las nuestras. Descubren que es una oportunidad importante para sus autores y vender libros. Este año hemos visto publicidad de Lemaitre y Alfaguara en autobuses, algo que yo no había visto nunca en Valencia. Lo han hecho coincidir con el festival y han visto que valía la pena. Es lo que nos demuestra que hay editoriales que aprovechan y apoyan el certamen y creo que eso es bueno para todos.

B: Todos salen ganando.

L: El año pasado también hablamos de la ciudad y la relación con las instituciones. ¿Cómo ha ido este año?

J: Pues mira, una cosa de la que estamos muy contentos es que tenemos una relación nueva con la concejalía. Es decir, nos ha recibido, le hemos explicado el festival, nos han entendido y participaremos en la línea de interés y supone un gran respaldo. Es un gran cambio con respecto a antes, cuando no éramos ni siquiera recibidos y creo que hasta se nos despreciaba como producto y evento, como a muchos otros. La Diputación nos sigue apoyando pese a las dificultades económicas y con las conversaciones que hemos tenido creo que también creen en nosotros y van a estar apoyando el festival. Las instituciones valencianas están respondiendo como se debe esperar frente a un tema como es el cultural.

B: Incluso fuera de lo que es cultura, como desde la concejalía de acción social. La concejala Isabel García Lozano que tras un encuentro casual estuvimos hablando del festival, y hoy (miércoles) vendrá a una de las actividades y demuestra el interés del ayuntamiento en general por toda la cultura, que antes se limitaba casi al Palau de la Música.

Santiago Álvarez (S): Nosotros nos hemos dirigido a ellos. Hemos hablado con la policía local para el acto en el que se habla de violencia de género, hemos hablado con las bibliotecas para hacer actividades, hemos dado ese paso con la ciudad. Están encantados.

B: Este año hay siete bibliotecas que son sede de Valencia Negra.

S: También participaremos con un acto en la Primavera Educativa, todo consiste en dar un primer paso en ese sentido.

L: Después de escuchar a los autores que han venido a VLC Negra, como Markaris, Manzini o Lemaitre, autores de novela negra muy activistas en lo social y político.

J: Sinceramente creo que yo no los recuerdo como autores de novela negra, sino como autores. Son grandes escritores que han hecho de todo y que da la casualidad de que han hecho novela negra y es perfecto para traerlos. Ellos han trabajado a fondo la literatura y como tal trabajan la vida. Tienen una edad, un altavoz y son gente a los que les mueven las pasiones. Claro que son activistas.

B: Una de las funciones del escritor es precisamente poner el dedo en la llaga, en denunciar todo los que nos rodea, en enfocar los temas que afectan a la sociedad. Interpretarlo, contar una historia y poner los problemas encima de la mesa. Los medios de comunicación silencian un montón de temas, están jugando a vender pildoritas comestibles en las redes sociales luchando por un mismo espacio. El periodismo de investigación se está dejando casi a los escritores.

J: Hay autores -por poner un ejemplo, como Belén Esteban (exagerando)- que podrán vender ahora miles de libros, pero cuando pase algo de tiempo desaparecen. Un autor grande es también una gran persona, con un nivel de experiencia altísimo, que ha ido a aprender, a buscar. Tienen una gran opinión del mundo.

S: Son personalidades más que autores. Una novela es un modelo a escala de como es el mundo. Tienen una visión muy fuerte y son creativos, y a la vez muy humildes y cercanos. A veces mucho más que otros autores que no son tan conocidos. Esa opinión clara del mundo la muestran y demuestra uno de los ejes del festival, que la cultura no es sólo entretenimiento sino que sirve para hablar de otras cosas. Unir cultura con la vida.

B: Un ejemplo que ilustra esto, el otro día hablando con una persona cercana al festival hablamos de la serie Crematorio. El IVAJ apoyó el rodaje de esta serie económicamente y hubo un informe favorable y la persona que lo realizó tuvo críticas, ¿cómo era posible que la Generalitat estuviera financiando esto? El responsable dijo: Mira, dentro de 50 años nadie se acordará de tu censura, y todo el mundo se acordará de Chirbes.

L. El homenaje a Chirbes es un ejemplo de lo que me estás contando. Una persona de pluma afilada y una visión fuerte.

B: Me quedo con una frase que dijo Mikel Labastida en la charla sobre Chirbes: ‘un crítico alemán decía que no había ningún escritor alemán que hubiera hablado de Alemania como Chirbes hablaba de España‘. Ahí está la capacidad de hablar de su tiempo y de ligarlo a las generaciones futuras.

J: Estamos muy contentos del homenaje a Chirbes. El Premio Ledesma es un lujo poder tenerlo en Valencia y a la vez es una responsabilidad. Esperamos que el nuestro sea el primer homenaje que va a recibir Chirbes, para recuperar una figura fundamental nuestra, al margen de la valencianía. Estamos muy contentos al conseguir hacer cosas que debían hacerse.

S: Como por ejemplo Rafael Tarsis. Al leer textos de la revista Prótesis y la época pre-Montalbán, aparecen varios autores, pero nunca Tarsis. Vino esta semana Escribá, que es un auténtico crack, experto número uno en el tema y nos lo puso en el mapa y fue maravilloso. Dijo que en Barcelona no junta a 40 personas como aquí para hablar de Tarsis. Y lo hemos sacado en prensa.

J: Con una novela, como la Biblia Valenciana, que toda una generación la ha leído en el instituto al estudiar valenciano, y cuyo autor, sin embargo, estaba totalmente olvidado. Es una pérdida de cultura.

S: Qué menos. Mucha gente me dice que es uno de sus libros favoritos, pero no se acordaban del autor.

L: ¿Y el año que viene? ¿2017? Vlc Negra en su quinta edición, ¿estáis seguros?

B: Sí. Por supuesto. Mucho se tendría que torcer para que no fuera así.

L: ¿Y seguir creciendo?

J: Si, seguir creciendo en público. En realidad buscamos crecer en creatividad y originalidad. No tanto en números.

B: Propuestas alternativas que puedan complementar el festival.

S. Queremos más disciplinas, igual que está el cine y la música, meter otras cosas que estamos pensando.

J: Sobre todo ser sorprendente. Que cada vez haya más gente que entre en el mundo de la cultura en general y de la literatura en general, que es lo que hacemos. Que vengan y que disfruten. Si no vinieran, cerraríamos el festival. Trabajando en la siguiente estamos, aunque depende de los apoyos.

S. Creemos que esta cuarta edición nos va a dar fuerza, si no nos da fuerza esto, qué nos la va a dar.

B: Después de toda la proyección en medios y que la gente va descubriendo el festival… la actividad es mayor y la gente te recomienda.

S. La gente viene con alegría a las actividades y se va con alegría.

B. Hay un mensaje que me gusta dar y es que no hacemos un festival “gafapasta” o “muy sesudo”, la gente se ríe, es muy cercano, no se trata de hacer tratados literarios sino de acercar la creación y los autores a su público.

J. También quería decir que es muy importante resaltar el trabajo del Instituto Francés, la Fundación Bancaja y a través del vino Icono, porque en nuestra tierra el sector privado entra muy poco en el sector cultura y estos apoyos son muy importantes para el festival. Es un acto de fe hacia nosotros y genera un clima fantástico para la cultura dentro de la sociedad valenciana.

S. Hay que festejar la cultura, debe ser algo festivo, gozoso y es la senda que hemos escogido.

Fotografía del acto de Pierre Lemaitre obra de Alfredo González, cortesía de VLC Negra.

Fotografía del homenaje a Rafael Chirbes obra de José Luis Bort, cortesía de VLC Negra.