- Jesús Cañadas se une al selecto club de autores españoles publicados por Valdemar.
- ¿A quién le puede importar un asesinato poco antes del apocalipsis?
Pronto será de noche es la nueva novela de Jesús Cañadas, publicada por Valdemar en la colección Insomnia, dedicada al terror contemporáneo. Este es el tercer libro publicado del autor gaditano tras El baile de los secretos y Los nombres muertos, alejándose del registro más fantástico y entrando de cabeza en un horror a medio camino entre el infierno personal y el miedo desconocido. Pronto será de noche no es un libro amable, sino que provoca una sensación constante de desazón, que va en aumento a medida que avanza la trama.
Según su sinopsis:
Pronto será de noche, pero no habrá diferencia. El cielo seguirá teniendo ese color incómodo. El fuego que baila en las ventanas sacará a la ciudad de su ceguera. Será de noche, pero no estará oscuro. Caerán pájaros muertos del aire. Golpeando el suelo con un sonido de guantes empapados.
Ese de ahí es Samuel. Es policía, o lo era. Ahora está atrapado en un atasco infinito. Como tú y como yo. Miles de coches en medio de una autovía que se dirige hacia el sur; aunque eso poco importa. Lo que importa es que huimos. Somos una multitud desesperada rumbo a ninguna parte mientras el mundo se derrumba a nuestro alrededor.
El apocalipsis ha llegado, el mundo se acaba, pero eso no es de lo que trata Pronto será de noche. El fin de la civilización tal y como la conocemos es un escenario, una manera de mostrarnos una situación imposible, la del eterno atasco en el que los personajes están atrapados, huyendo desde ninguna parte hacia la nada. De hecho, ese atasco es, quizá, un limbo, un purgatorio previo al cielo… o al infierno. Lo cierto es uno de los grandes aciertos de Cañadas es la mezcla de géneros, la constatación de que hoy en día una narración de horror va más allá de los clásicos tópicos y que no hace falta llevar de la mano al lector para contar una buena historia.
La investigación de un asesinato -en la línea más clásica de los misterios detectivescos de habitación cerrada– le da a Cañadas la oportunidad de explorar sus personajes, de mostrar cómo se comporta la gente que creemos normal en situaciones que, creedme, no tienen nada de normales. Si bien es cierto que la sensación de opresión aumenta con cada página, también hay momentos en los que la tensión no llega al nivel que uno espera. Un detalle menor en un libro muy bien rematado y que no puedo dejar de recomendar para los que pasan un buen rato pasando un mal rato.
Imagen de Óscar Sanmartín Vargas cortesía de Editorial Valdemar.
Jesús Cañadas
Pronto será de noche