Fatale, de Ed Brubaker y Sean Phillips

• Fatale es un cómic que mezcla novela negra y terror fantástico.
• Ha recibido numerosas nominaciones a los Premios Eisner.

Ed Brubaker y Sean Phillips son un tándem creador de primer orden dentro del mundo del cómic. Su fusión de géneros en Fatale supone un cómic muy atractivo para todos los amantes de la novela negra clásica y el terror cósmico. Fatale nos cuenta la historia de una mujer fatal cuya existencia se alarga a través de las décadas sin que su poder para subyugar a los hombres se reduzca en absoluto. Sin embargo, ese poder tiene un lado oscuro, ya que está destinada a ser un sacrificio dedicado a un dios monstruoso.

Brubaker juega sin ningún tipo de reparo con los referentes de la novela negra, variando los narradores y los puntos de vista en cada uno de los arcos que presenta. De ese modo, Fatale está ambientada en varias décadas, con sus típicos clichés de detectives alcohólicos, sectas destructivas o fiestas prohibidas en Hollywood, desde los años 20 hasta la década de los 90.

En Fatale, el elemento dedicado al terror fantástico tiene una clara influencia lovecraftiana, ya que el dios y sus acólitos tienen un origen cósmico y recuerdan en ocasiones a las descripciones del autor de Providence. Las historias de Fatale usan a la femme fatale como hilo conductor, pero son otros los protagonistas de cada arco. Que nadie espere muchos finales felices en estos cómics.

El trabajo de Phillips en el dibujo es más que correcto, dando el toque preciso de ilustración pulp que luego Dadvid Stewart, el colorista, ha llevado con maestría, logrando por su trabajo un Premio Eisner.

Fatale es una rareza, tal vez, por esa mezcla de géneros que puede provocar el rechazo de los muy aficionados a la novela negra, pero que sin duda merece la pena para todos aquellos que estén a la búsqueda de historias pulp con un trasfondo terrorífico y una buena historia detrás. Recomendable.