Lectura y verano, siempre de la mano. Ese podría ser un buen lema para cuando llega el calor y buscamos refugio en playas, montañas, piscinas o terracitas. Los días se hacen eternos y no hay nada mejor que un buen libro para pasar el rato. Y ya si tiene unos cuantos asesinatos de por medio, pues mejor que mejor.
Si estos meses tenéis la oportunidad de salir de vacaciones -una suerte cada vez más escasa-, desde Lecturalia os vamos a recomendar algunos libros de novela negra y criminal por si acudís a alguno de los destinos turísticos más típicos de España. No hay mejor inmersión en las páginas de un libro que las propias calles de la ciudad donde esté ambientada, su luz, sus gentes y hasta el aire que allí se respira.
Si vais a viajar hasta las costas valencianas, Lorenzo Silva acaba de presentar su nueva novela, Los cuerpos extraños. Se trata de otra investigación más de Bevilacqua y Chamorro, esta vez sobre la muerte de una alcaldesa de un pueblo costero. Mafias y corrupción junto al Mediterráneo.
En el caso de que vuestro destino sea Barcelona, recomendaros Yo fui Johnny Thunders, otra historia de Carlos Zanón en la que destacan sus personajes perdedores y la ambientación de una ciudad muy diferente a la que se anuncia como un paraíso para turistas urbanitas de todo el mundo.
Si preferís el norte, no puedo dejar de recomendaros La playa de los ahogados, de Domingo Villar, donde el inspector Leo Caldas hace un recorrido por la costa gallega. Gastronomía y paisajes reales en una novela absorbente. También es interesante su primera novela, Ojos de agua.
Siguiendo el panorama norteño, pero esta vez en el interior, cerca del río Baztan, en uno de los más bonitos valles navarros, se desarrolla El guardián invisible, de Dolores Redondo, una investigación salpicada de leyendas y mitos locales. Perfecta para leer tras pasar un rato perdido en el bosque… o tal vez no.
Si sois realmente afortunados y viajáis este verano a las Islas Canarias, podéis elegir una gran variedad de libros criminales, como algunos de Lorenzo Silva, pero voy a recomendaros a un autor un poco menos conocido: Alexis Ravelo. Sus dos últimas novelas, La última tumba y La estrategia del pequinés, muestran también una visión distinta a la del destino idílico.
¿Y vosotros? ¿Os gusta la idea de leer novelas ambientadas en las ciudades donde viajáis? ¿Añadirías algún libro más? Os esperamos, como siempre, en los comentarios.