Crimen en el Barrio del Once es el primer caso del comisario Lascano, el Perro, un policía que intenta hacer su trabajo en plena dictadura argentina, cuando cualquier sentido de justicia se ve desbordado por la realidad. Al igual que su país, Lascano está herido y paralizado, en su caso por la muerte de Marisa, su mujer, cuyo recuerdo le acompaña continuamente debatiéndose entre la nostalgia y el dolor de la pérdida, que le lleva incluso a plantearse acabar con su vida.
La acción arranca con la aparición de tres cuerpos en lo que parece un ajusticiamiento militar lo que para la policía significaría mirar para otro lado, pero uno de los cadáveres parece haber sido colocado allí, como si alguien hubiese pretendido librarse de él sabiendo que nadie en su sano juicio va a investigar un asesinato político perpetrado por los militares. Lascano hace lo único que puede hacer, hacer la vista gorda respecto a los dos jóvenes ajusticiados y centrarse en el cadáver de un hombre mayor, asesinado de manera diferente y, claramente, en un lugar diferente. Pero ¿cómo podía saber el asesino donde iban a abandonar los militares los cadáveres?
Eva es una joven opositora a punto de ser atrapada en una redada y cuyo destino parecía ser el de hacer compañía a los muertos de la cuneta pero, en cambio, un encuentro con Lascano lo cambia todo; el gran parecido de la joven con su esposa muerta le obliga a ocultarla. La relación entre ellos dos, entre Lascano y el recuerdo de su mujer, su miedo a seguir adelante, a aceptar la pérdida, permiten a Mallo escribir algunos de los mejores momentos de la novela.
Otra mujer, Lara, una hermosa representante de la clase alta se encuentra atrapada en un matrimonio que no le reporta el nivel de vida que esperaba y será el detonante que terminará con un superviviente de un campo de concentración como tercero en discordia de la pareja muerta en la cuneta.
Pero no nos despistemos, Crimen en el Barrio del Once es una novela de personajes sí, pero su trasfondo, su escenario, es una dictadura criminal que lo impregna todo. Giribaldi encarna el régimen y es él la pieza que moverá la historia. Su relación con su mujer, lo humaniza pero no precisamente en el mejor sentido de la palabra.
Con Crimen en el Barrio del Once Ernesto Mallo comienza los casos del comisario Lascano que continuarán con El policía descalzo de la plaza San Martín y Los hombres te han hecho mal.
Ernesto Mallo
Crimen en el Barrio del Once