De acuerdo, si hablamos de placeres está claro que la lectura y la gastronomía son dos de los más relacionados, y no sólo por esa afición de muchos escritores a la buena mesa que trasladan al papel para deleite de sus lectores -ahí tenemos como ejemplo a Vázquez Montalbán o Andrea Camilleri-, sino también por una curiosa afición pastelera por adaptar libros a base de azúcar, bizcocho, nata y chocolate.
A veces puede salir bien y a veces mal. Lo cierto es que uno de los libros -o sagas- más utilizadas es la de Crepúsculo. Por lo visto hay mucha aficionada a hincarle el diente a su vampiro favorito. Por cierto, dentro de «a veces mal» podría enseñaros esto… (aunque supongo que es una cuestión de gustos)
Pero, por fortuna, no siempre es así y hay auténticas maravillas relacionadas con el mundo de los libros. Se nota la mano de auténticos artesanos en este pastel dedicado a Jane Austen, con citas de sus libros y decorado con elegancia. Todo un regalo.
Y la verdad es que este sombrero de chocolate pasaría perfectamente por el auténtico de Hogwarts… aunque es probable que en lugar de utilizarlo para elegir casa acabara formando parte del postre. A mí se me hace la boca agua…
Vía: Booklicious