Recientemente, la NPR (la radio pública estadounidense), en su sección de literatura, pidió ayuda a oyentes y visitantes de su página web para crear una lista de los cien mejores libros de ciencia ficción y de fantasía. Para evitar los límites habituales entre ambos géneros, se hizo un llamamiento para votaciones de las mejores obras de “ficción especulativa”, que incluirían todo tipo de ci-fi y fantasía pero que excluirían obras de terror y de fantasía y ciencia ficción juvenil (así que nada de Harry Potter ni Crepúsculo). Los resultados, fruto de más de sesenta mil votos, no traen grandes sorpresas, pero sí algunas inclusiones interesantes, de obras más recientes que empiezan a formar parte del canon, convirtiéndose en referentes indispensables para nuestro tiempo y el de generaciones futuras.
Para sorpresa de nadie, la número uno absoluta ha sido la magnífica El señor de los anillos de J.R.R. Tolkien. Tolkien sigue siendo el rey de lo fantástico, y seguramente su reinado será largo y glorioso. Puede resultar más inesperada la elección del segundo, que es La guía del autoestopista galáctico, de Douglas Adams. Es interesante que un libro de ciencia ficción cómica, un género poco exitoso por lo general, haya quedado tan bien posicionado. Seguramente a muchos se les ocurrirán bastantes libros que consideren con más mérito, pero está claro que la obra, por lo menos en el mercado anglosajón, sigue gozando de una salud más que envidiable. En tercer lugar tenemos El juego de Ender, de Orson Scott Card, un clásico de la ciencia ficción recomendable para todas las edades. El cuarto puesto le corresponde a Dune, de Frank Herbert, un autor cuya fantástica imaginería se ha visto apoyada de manera repetida por el cine y la televisión. Y en el quinto lugar ya aparece George R. R. Martin, que comparte iniciales con Tolkien y poco más, ya que su interpretación de la fantasía épica, que incluye poca fantasía y bastante épica, y que domina a la perfección el desarrollo de personajes y el casi televisivo cliffhanger, ha hecho de su saga Canción de hielo y fuego uno de los best-sellers más interesantes de los últimos tiempos. Que el lector medio pueda interesarse por la fantasía, un género frecuentemente denostado, es algo que tenemos que agradecer a Martin los amantes de la épica con tintes adultos.
En los puestos 6 y 7 nos encontramos con dos clásicos de la distopía: 1984, de George Orwell, y Fahrenheit 451, de Ray Bradbury. Al mencionar estos títulos uno no puede evitar pensar también en Un mundo feliz, de Aldous Huxley, pero éste se queda en el noveno lugar, adelantado por la trilogía Fundación de Isaac Asimov. En el décimo puesto tenemos de nuevo a un escritor más cercano a nuestro tiempo, a Neil Gaiman con su American Gods, representante de un nuevo tipo de fantasía oscura, mezclada con la mitología, que ya desarrolló en su conocido cómic Sandman (que por cierto obtiene el puesto 29 de la lista).
Podéis encontrar el resto de la lista, donde figura una abundancia de clásicos (desde Moorcock a Arthur C. Clarke, de Heinlein a Julio Verne), junto a una refrescante cantidad de escritores actuales (Pratchett, Dan Simmons, Neal Stephenson o Susanna Clarke, entre otros). Como con cualquier lista de votación popular, surgen quejas y recriminaciones: algunos autores se repiten demasiado, otros faltan. ¿Cuál es vuestra opinión? ¿Creéis que es una lista representativa (hay que tener en cuenta, además, de que se trata de una lista elaborada desde la perspectiva estadounidense)? ¿Cuál es, a vuestro juicio, el mejor libro de ficción especulativa que existe?