El sistema tradicional basado en editoriales como fuente principal de dinero y recursos a la hora de publicar un libro se tambalea con la llegada de las nuevas tecnologías, ya que se presentan diferentes escenarios capaces de rivalizar, a largo plazo, con los actuales.
¿Qué es el crowdfunding?
El crowdfunding es una manera eficiente de aprovechar la capacidad de Internet y de las redes sociales para encontrar patrocinadores de un proyecto. En el caso del que hablamos ahora, de un proyecto literario. Si bien algunos hablan de mecenazgo como lo más parecido al crowdfunding, deberíamos matizar el término a un mecenazgo descentralizado, ya que se busca la mayor cantidad de participantes posibles a un bajo precio. Por otro lado, el mecenas clásico influía -y de qué forma- en el producto artístico que pagaba, algo que no tiene por qué pasar en el crowdfunding, a menos que esa sea una de las condiciones acordadas entre las múltiples partes.
Existen varias páginas web en las que se presentan proyectos y se solicita una pequeña cantidad de dinero, en busca de un total que permita, en el caso de la literatura, la correcta publicación de una obra, bien en papel, en digital, en ambos y con el tipo de licencia que se considere oportuno. Existen varios proyectos, unos ya completados, como el de Santiago Eximeno y su novela Condenados, o el más poético In absent(i)a, todavía por completar. Depende de la cantidad de dinero, el colaborador obtendrá algo especial, algo que le permitirá conectar a un nivel diferente con la obra, formando parte de su creación.
Por otro lado, la búsqueda de este tipo de financiación puede ser entendida como un intento de primar la popularidad sobre la calidad de las obras a producir, generando un ruido que oculte obras muy interesantes ocultas tras proyectos capaces de generar más espectáculo mediático.
El crowdfunding es una manera más de trabajo en la que el autor puede desvincularse de una editorial, con el único filtro de la confianza que genere su trabajo en un determinado número de personas. ¿Se debe funcionar siempre así? No creo, la diversidad en formatos y escenarios debe ser lo suficientemente grande como para que se ofrezcan alternativas suficientes para cada tipo de autor.
Santiago Eximeno
Condenados