Uno de los periodos más importantes para el desarrollo de la cultura occidental, su filosofía y pensamiento es, sin duda, la Antigua Grecia.
De los griegos nace gran parte de nuestra cultura y gracias a ellos tenemos unas primeras leyendas escritas y cantadas a lo largo de los siglos. Sus mitos conforman, junto con Roma, de la que hablaremos más adelante, una base común para casi toda Europa. Simplemente hablando de Homero y de la Iliada tendríamos suficiente para conocer y hablar de aquella épica casi mítica que va desde las primeros conflictos anteriores a Troya al gran Imperio de Alejandro Magno.
Dentro de la literatura son incontables las obras que han dispuesto su escenario en la Antigua Grecia, aunque no hay tantas que cumplan un mínimo de seriedad y muchas de ellas aprovechan esa época de héroes mitificados para colar aventurillas más cercanas a la fantasía que la historia real.
Dejando a un lado la gran influencia de la novela negra, como para en Roma, a la que dedicaremos un artículo de manera exclusiva, podríamos empezar con uno de los clásicos del género, Robert Graves y su El vellocino de oro, todavía en una época indefinida pero que el buen hacer de Graves convierte en una novela muy interesante.
Otro de los conocidos por los amantes del género, Valerio Massimo Manfredi, tiene unas cuantas obras a destacar, como Talos de Esparta, El talismán de Troya o la serie de Alexandros, en la que narra la vida de una de las más queridas figuras de esta época: Alejandro Magno. Kazantzakis tiene una obra también Alejandro el grande, de obligada lectura sobre el mito.
Nicholas Nicastro también destaca con Hijos de Esparta, hay que tener en cuenta que tras el éxito de la película 300 -basada en un cómico poco histórico y muy personal-, el interés por el mundo espartano ha crecido en los últimos años con títulos como Hijos de Heracles, de Teo Palacios.
Otro de los autores dedicado casi en exclusiva a Grecia, aunque más al mundo de la guerra que a la propia cultura, es Steven Pressfield, con varios libros sobre Alejandro y sus campañas bélicas, como La campaña afgana, por ejemplo.
No podemos dejar de hablar de este rico subgénero de la novela histórica sin mencionar a Mary Renault, prolífica autora que escribió clásicos como La máscara de Apolo, El rey debe morir o El muchacho persa, libros en los que se destaca el mundo sexual griego, algo que muchos autores han preferido dejar de lado.
A título personal, recomendar tres novelas de un autor español, Javier Negrete, que harán las delicias de los aficionados al mundo griego. Una de ellas es estrictamente histórica, La gran aventura de los griegos, otra con más dosis de aventuras, Salamina, y la tercera entraría dentro del género fantástico, siendo ganadora del Premio Minotauro, Señores del Olimpo.
Esta selección, claro, no puede ser otra cosa que una pequeña ventana al increíble número de libros dedicados a la Antigua Grecia. ¿Cuáles son vuestros favoritos? Os esperamos en los comentarios.