El último jugador que nos faltaba en el baile del libro electrónico ya ha dado los primeros pasos para situarse a codazo limpio en la carrera por hacerse con su trozo del mercado: Google anuncia que a finales de junio o principios de julio comenzará a distribuir libros mediante su nuevo servicio Google Editions.
¿Cuál es el punto diferencial de Google Editions? Si Amazon apuesta por el precio y el Kindle y Apple por su iPad y la iBook Store, Google se lanza a diferenciar el producto -el libro, a fin de cuentas- de un dispositivo único creado para atarlos a todos en las tinieblas.
La idea de Google es que se pueda acceder a los libros de múltiples webs para múltiples dispositivos de lectura. La única pega que veo es que, por lo que estoy leyendo, mantienen la propuesta de «lectura en línea», es decir, que necesitarás un gadget capaz de conectarse a Internet para disfrutar de la lectura.
¿Qué queda entonces por resolver? Los precios, claro. Habrá que poner unos mínimos y unos máximos -o decidir la libertad absoluta-, además de establecer porcentajes para cada uno de los involucrados en el proceso. Ya hablamos hace un tiempo de las primeras propuestas, pero parece que no están todavía nada claras.
¿Qué intenta Google con su iniciativa? Romper la dependencia de los sistemas dependientes y cerrados, algo que a las editoriales les debería interesar, ya que podrían acceder a un mercado mucho más grande, y con menos esfuerzo por adaptarse, que si tienen que trabajar pensando en Amazon o en Apple.
¿Saldrá en España? No lo sé, pero todo me dice que hasta que no se compruebe bien en Estados Unidos cómo funciona el sistema dudo que las editoriales de aquí, bastante liadas en sus propios proyectos gigantes, se atrevan a darle la mano a Google si no es para señalarle la puerta.