El Centre Blanquerna de Madrid inaugura el día 1 de marzo la exposición El Madrid de Josep Pla dentro de la serie de actos realizados entorno a figuras destacadas de la cultura catalana. Según el comisario de la exposición, Joaquim Molas, “el estudio de las relaciones que sostienen entre sí sus diversas lenguas, y por lo tanto, sus diversas literaturas” es una de las asignaturas pendientes de la cultura española.
La exposición, que permanecerá abierta hasta el 25 de abril, se centra en dos obras de Pla, Madrid. Un dietari (1929) y Madrid. L’adveniment de la República (1933), que nacieron de sendas estancias del escritor de Palafrugell en Madrid como corresponsal, incluyendo también fragmentos de sus obras completas. La muestra está dividida en ocho secciones, en la primera de ellas se presenta el marco histórico, desde la muerte del Presidente del gobierno Eduardo Dato en 1921 en un atentado anarquista hasta la proclamación de la República. Los siguientes tres apartados muestran las calles de la ciudad, sus barrios y sus parques. En otro capítulo nos encontraremos con las tertulias a las que acudía Pla y a los cafés. Por último, la geografía humana, las personas, serán las protagonistas de los tres últimos apartados.
Madrid, un dietari fue escrito en 1928 utilizando artículos y notas de su primera estancia en Madrid y empieza asumiendo que su visión de la ciudad se podía ver afectada por tópicos y prejuicios:
¡A los veinte años se tiene una visión tan simplista de las cosas! ¡Cuesta tanto comprender que la vida es enormemente complicada y viniendo de Cataluña, sobre todo, ocurre que uno se nutre, por lo que hace referencia a España, de una literatura extremista, carente de toda finura incisiva, extremadamente pueril: viniendo de Cataluña produce un efecto extraño ver que el español, incluido el madrileño, es también un ser difícil de comprender, difícil de someter a nuestras ideas tradicionales, y a nuestro instrumental chapucero y aproximado.
Una interesante muestra que permitirá conocer mejor, no sólo al escritor, sino también una época y un momento donde todo estaba por construir, incluida nuestra visión de nosotros mismos.
Josep Pla