Kurdo Baski, amigo del escritor sueco autor de la trilogía Millenium, que incluso llega a aparecer como personaje en sus novelas, acaba de hacer caja con la presentación de su libro Mi amigo Stieg Larsson.
Al parecer Baski hace honor a la frase “Con amigos como estos, para que quiero enemigos“, ya que le pega a Larsson un repaso en toda regla que ha hecho saltar ya tanto a la viuda, Eva Gabrielsson, como a un buen número de críticos literarios entre los que el libro no ha triunfado, precisamente.
Baski alude a algo que ya había contado con anterioridad, que Larsson no intervino al presenciar una violación y que ese hecho le llevó a crear el superpoderoso personaje de Lisbeth Salander.
Lo que en realidad ha levantado más ampollas son ciertas revelaciones sobre la figura de Larsson que no se habían hecho públicas, como que falsificó entrevistas o escribió textos muy partidistas de manera consciente. Por lo visto hay más pullas lanzadas a su amigo Larsson, pero para tener acceso a ellas tendremos que esperar a que Destino publique el libro en el mes de Abril.
Baski parece haberse adelantado a Gabrielsson, que también está preparando un libro sobre el fallecido escritor sueco, y aprovechado así la larssonmanía existente en Europa y que puede desatarse en EEUU si, como se rumorea, se vuelven a adaptar allí las novelas.
Además, por si fuera poco en este culebrón en el que se ha convertido el legado de Larsson, su viuda confirmó que tiene 200 páginas del cuarto libro y que, además, sabe cómo tiene que acabar. Al parecer se ofreció a terminarlo a cambio de los derechos de las obras, a lo que el resto de la familia Larsson se negó, un conflicto que parece imposible de resolver, aunque dentro de unos años, con el fenómeno mediático ya consumido, nunca se sabe qué puede pasar, o a quién pueden contratar para “terminar” la cuarta novela.