Licenciado en Derecho por la Universidad de Madrid, ingresó por oposición en el cuerpo de Fiscales del estado, ejerciendo en Soria y después en Alicante, en donde vivió la Guerra Civil, y siendo encarcelado al final de ésta por pertenecer al ejército republicano. Liberado por la intervención de algunos amigos, fue depurado treinta meses y después nombrado fiscal en Santander, en donde compaginaría este trabajo con el de profesor en la Universidad internacional Menéndez Pelayo, además de cofundar la revista Proel, colaborar en el periódico Alerta y dirigir las actividades literarias del Ateneo de Santander. En 1951, dejó su carrera para marchar a Puerto Rico con su amigo Juan Ramón Jiménez, siendo profesor en las facultades de Leyes y Humanismo. Tras la muerte de éste, marchó a estados Unidos, siendo profesor de Literatura durante quince años en la Universidad de Texas en Austin y profesor invitado en las de Stanford, Columbia en Nueva York, California en Los Ángeles, Chicago (en el departamento de Lenguas Románicas) y California en Davis, jubilándose en 1986 y regresando a España. En 1989 fue elegido miembro de la Real academia española de la Lengua y ese mismo año obtuvo el Premio Príncipe de Asturias de las Letras.
