Estudió Filología Clásica en la Universidad de Barcelona, y en 1961, marchó a Figueres, en donde pasaría toda su vida. Alí fue profesora y desarrolló toda su carrera literaria. Trabajó en crítica y traducción y colaboró en numerosas revistas literarias. Fue miembro de la Asociación de Escritores en Lengua Catalana, y recibió numerosos premios, como el Josep Pla, y honores como la Cruz de San Jorge de la Generalitat de Catalunya.
Cultivó la narrativa, el ensayo, la poesía y la crítica, así como relatos cortos juveniles e infantiles.