Trabajó en el Departamento de Antigüedades del museo del Louvre, y fue miembro del Instituto Francés de Arqueología Oriental. Es mundialmente conocida por sus trabajos para la salvación de los templos de Nubia, condenados a desaparecer como consecuencia de las ampliaciones de la presa de Asuán. Ha recibido numerosísimos honores, entre ellos la Legión de Honor francesa.
Como escritora destaca por sus libros sobre el arte e historia de Egipto, narrados de forma sencilla y directa y con carácter divulgativo, no obstante de estar muy bien documentados.